«Deriva comercial» y presuntas irregularidades en un proyecto de comunidades energéticas
Socios de Bierzo Renovable acuden al juzgado «para recuperar el espíritu voluntario y altruista con el que se fundó la asociación».
El 21 de julio de 2021, con el apoyo de la Cooperativa Energética de CyL se inició el proceso para crear una asociación con el fin de impulsar y ayudar, de forma altruista y voluntaria, a la creación de comunidades energéticas en el Bierzo. “La idea era ayudar a impulsar en El Bierzo una nueva cultura en la generación, distribución y uso de la energía, para que la transición energética sea realmente justa, tenga perspectiva de economía social y contribuya a la renovación en El Bierzo”, explica uno de los socios fundadores de la asociación. Enrique Díez, profesor de la Universidad de León.
Finalmente, el 8 de octubre de 2021 se constituía la Asociación Bierzo Renovable con ocho personas, mediante una declaración de principios y la elección de tres personas como junta directiva. Tras un año de funcionamiento “con el espíritu con el que se había constituido, los conflictos empezaron a surgir cuando la presidenta y el auto-nombrado portavoz de la Asociación, su marido, empezaron a decidir gastos y controlar las cuentas».
El mayor punto de friccón se produjo, según explica el entonces tesorero y miembro fundador del colectivo, al detectarse que ambos directivos «están obligando a las empresas que hacen instalaciones a los socios o a través de la asociación a pagar un porcentaje de sus ingresos por cada instalación, presentándolo como donación voluntaria”, Una práctica sobre la que, asegura no haber tenido ni información ni control.
En varias asambleas se manifestó por parte de socios y del propio tesorero la oposición a cobrar esa cuota a las empresas, por considerar que además podría parecer un chantaje, e incluso una contabilidad en negro de la asociación. “Lo cual no es el espíritu de nuestra asociación, que se había fundado sin ánimo de lucro y con la finalidad de apoyo de forma voluntaria y sin cobrar, que era como lo estábamos haciendo todos los demás socios”, afirma Juan Alarcón, socio de Bierzo Renovable.
El conflicto definitivo que ha hecho estallar la Asociación Bierzo Renovable se produjo cuando la presidenta convocó una reunión extraordinaria el 28 de enero de 2023 a la que solo acudieron 12 personas. “Somos 140 socios (según la última información dada en asamblea), pero muchos no pudieron ir por convocarse esta reunión extraordinaria 5 días antes y no 15 como dicen los Estatutos y en esa reunión los pocos que allí estaban, sin ningún control (no estaba ni el Secretario, ni el Tesorero), tomaron decisiones muy graves y no se sabe ni siquiera si eran socios o no esos 12”, explica otro de los socios de Bierzo Renovable que estuvo presente en la reunión.
Destitución del tesorero y bajas de socios fundadores
Durante esa reunión, explica, se introdujo al margen del orden del día un punto de votación para destituir al tesorero, socio fundador de Bierzo Renovable. “Les había advertido repetidas veces que no se podían hacer las cosas así. Que las decisiones tenían que ser acuerdos de la Junta Directiva, y además ratificados en Asambleas. No manejar la asociación como si fuera algo suyo”, argumenta el tesorero. Antes de esa reunión, señala, «habían abierto una nueva cuenta, en otro banco, a espaldas del propio tesorero y de todos los socios», sin aclara4 «qué sentido tiene una doble contabilidad, con dos cuentas en dos bancos diferentes, en una de las cuales no figura ya el tesorero nombrado en el acta fundacional de la asociación.
Cuando se pidieron explicaciones sobre estas decisiones en los grupos de Whatsapp y Telegram de la asociación, «la presidenta y su marido censuraron los grupos y han expulsado de ellos a socios, y ahora tratan de expulsar de la asociación a quienes no admiten sus imposiciones”, explica Enrique Díez. Además, asegura que han censurado y controlado la información en la asociación modificando el sistema de los grupos de Whatsapp y Telegram era que sean solo de lectura.
Un sector de los socios (reunidos en la primera asamblea de la nueva comunidad energética que han creado en Lillo del Bierzo) han comunicado colectivamente que se darán de baja “ante la deriva que ha tomado un proyecto que comenzó siendo una propuesta ilusionante y que dos personas han convertido en un espacio de conflicto permanente”, afirma Juan José Naveira, uno de los que abandonará este proyecto. “No estamos de acuerdo con la deriva comercial y de negocio que ha impulsado la presidenta y su marido en esta Asociación, que es incompatible con los principios y la idea inicial con la que surgió y por la que se unieron. Sobre todo, si además se pretende utilizar para constituir una empresa OTC (Oficina de Transformación Comunitaria)”, detalla.
Además, algunos socios han decidido emprender acciones legales contra este proceder poniendo en manos de la justicia la actual situación de la Asociación Bierzo Renovable. Aunque algunos estarán dispuestos a quedarse “si se repiensa lo que está pasando, se dialoga y se recupera el espíritu inicial, voluntario y democrático, de la Asociación”, asegura Jaume Sardá, otro socio fundador de Bierzo Renovable.