UPL denuncia que las ambulancias no pueden acceder a la calle del Rañadero
Los leonesistas advierten que los vecinos se hartan de que las obras para solucionar esta situación «nunca empiezan».
El candidato de Unión del Pueblo Leonés (UPL) al Ayuntamiento de Ponferrada, Manuel Ferreiro, denuncia que las ambulancias de asistencia médica del servicio de emergencias del 1-1-2 no pueden acceder a la calle del Rañadero. Todo ello, por culpa de las vallas que protegen las obras anunciadas ya hace tres meses y que siguen sin comenzar.
Vecinos de esta zona trasladaron a UPL-Bierzo que el pasado sábado, en torno a las 20:45 horas de la tarde, una ambulancia no pudo acceder a la calle y tuvieron que sacar al enfermo andando y en pijama hasta la plaza Las Nieves para introducirlo en la misma.
Las obras presentadas el 13 de julio del pasado año por el equipo de gobierno encabezado por Olegario Ramón acompañado por las concejalas Concepción de Vega y Carmen Doel y que fueron adjudicadas a una empresa local con un presupuesto de 37.994 euros. El objetivo de estas obras son la rehabilitación del pavimiento del vial con piezas de granito de diez por diez centímetros y la colocación de una chapa con un símbolo del Camino de Santiago.
Para ello, los operarios del Ayuntamiento vallaron el pasado mes de enero las dos zonas de actuación, una en la parte alta y otra en el acceso desde la plaza de las Nieves. Pues bien, ya tres meses después las obras siguen sin empezar y la movilidad de los vecinos se dificulta y, además, se ofrece una imagen lamentable a los peregrinos y a los visitantes.
Por este motivo, desde la formación leonesista pedimos “la inmediata ejecución de las obras”, ya que no es comprensible que una pequeña obra que se puede ejecutar en pocos días esté tres meses después sin realizar y afectando como en este caso del acceso de las ambulancias y otros vehículos de emergencias.
Ferreiro criticó que parece que “están esperando a realizarle días antes de la celebración de las elecciones” de un vial que forma parte del Camino de Santiago y constituye una arteria importante para el turismo de Ponferrada, una zona ya de por sí abandonada por el Consistorio y que con esta situación se ofrece una imagen de la ciudad que “no es la mejor”.