[LOS GATOS DEL CALLEJÓN] ¿Más vale tarde?
UN GATO | Las gatas del callejón saben, de buena tinta, que próximamente el señor Arsenio Terrón será relevado de su cargo de director de la fundación CIUDEN. Y aunque celebramos un relevo, que en nuestra opinión debió de producirse mucho antes, tampoco entendemos las razones por las que se toma la decisión en este momento. O tal vez sí. Seguramente la proximidad de las elecciones municipales ha propiciado un “lavado de cara”, de esta institución varada en la inoperancia, del mismo modo que ha servido para poner en escena la “Térmica Cultural”, con un evento que tuvo lugar hace poco en Ponferrada.
Del señor Terrón solo diremos que pertenece al grupo de personas que accede indebidamente a un cargo y una vez en él no puede desarrollar las funciones y responsabilidades reales del mismo. Desde la tribuna que gentilmente nos concede BIERZO DIARIO hemos criticado estos perfiles que una vez nombrados ¿hacen? una gestión irrelevante y mantienen un status quo que solo les beneficia a ellos, insensibles al deterioro de la institución que produce su incompetencia. En resumen y como hemos comentado en otras tribunas, pertenece al “club” de los surfistas que cobran por pasar el día y dedicarse a sus asuntos propios. Lo más grave es que no parece que esa situación importe a los que le propusieron para el puesto ni tampoco a sus superiores.
Con todo, el hecho no sería tan significativo si fuera una excepción; un nombramiento desafortunado que por circunstancias diversas permanece resguardado en la maraña de razones estratégicas, políticas u operativas que retrasan su relevo. No sería el primer caso ni será el último.
Lo malo es que en El Bierzo (seguramente en todas partes), nombramientos como ese responden a una forma muy extendida de proponer el acceso a los cargos públicos; y aquí la relación incluye puestos en las listas de concejales, procuradores en cortes, diputados provinciales, presidentes y vicepresidentes de la Diputación provincial, y muchas otras sinecuras en empresas publicas, agencias, Consejos, Observatorios, etc.
Así que, al tiempo que olvidamos al sr Terrón, lamentando los años perdidos para una comarca que está buscando su camino desesperadamente y necesita todos los instrumentos a su alcance, nos preguntamos si hay razones para creer en un futuro más halagüeño para CIUDEN; si esta vez el Ministerio para la Transición Ecológica pondrá más interés en recuperar una organización que seguro que podría aportar mucho valor al desarrollo integral de la comarca.
Recordemos que CIUDEN fue, una vez, un proyecto presentado como ilusionante. El gobierno de Rodríguez Zapatero lo creó con ambición y se plantearon oportunidades reales, que sin embargo, se vieron cortadas de cuajo cuando el gobierno cambió de color y la entonces presidenta de la Diputación Provincial, convenció al gobierno de que la institución era una “injerencia” en sus dominios territoriales (manual del cacique, capítulo 1). Se optó por desmantelar el edificio manteniendo la fachada y asfixiando la institución, tarea que desarrollaron brillantemente dos “liquidadores”, de estilos diferentes, pero liquidadores al fin. Podríamos apuntar que mantener durante 4 años a los mismos que se eligieron para ocupar cargos de responsabilidad en el proceso de desmantelamiento, no ayudó a dar imagen de reconstrucción por parte del sr. Terrón.
Lo malo es que el Ministerio para la Transición Ecológica socialista surgido de las elecciones de 2018 no entendió el valor de CIUDEN como herramienta de desarrollo local, y ante las presiones de la estructura provincial, aceptó que el nombramiento de la fundación lo hiciera el territorio (no eran los mismos responsables de aquella Diputación, pero quizás si algún alumno aventajado); a cambio dejó a la institución sin presupuesto, sin funciones y sin futuro. El resultado es que tristemente hoy, en El Bierzo, nadie cree en CIUDEN; una organización quemada viviendo en el limbo durante tantos años que ya no sabe cual es su razón de existir y sufre el desapego creciente de la ciudadanía.
Nos preguntamos si este relevo se hará como siempre y otra vez no servirá para nada. Porque aquí están los padrinos provinciales y locales con un ansia infinita de controlarlo todo. ¿Y en Madrid?. ¿Aceptará el Ministerio nombrar a alguien consensuado con los próceres del territorio, para que estén tranquilos aunque sea una persona irrelevante?. ¿Se puede nombrar a alguien solvente a cuatro días de las elecciones generales? ¿Ofrecerán otro «concierto» para arreglar los problemas de las cuencas mineras?
Esperamos, deseamos y apoyamos que en esta ocasión se pretenda dar un impulso real a CIUDEN; que no se trate de un lavado de cara por la cercanía de las elecciones municipales. Por cierto, qué mal implicar al presidente Zapatero en la presentación de la “Térmica Cultural”, un acto cuyo contenido real está muy lejos de responder al objetivo primigenio con el que se presentó la institución, precisamente por ese presidente. ¿Para qué?
Muchas preguntas y muchas dudas sobre la solvencia de lo que pueda venir. También un rayo de esperanza. Veremos.