Más de 50 plataformas firman un manifiesto contra la «colonización energética»
La Segunda Declaración de Ponferrada impulsa el movimiento anti incineración y contra la invasión eólica y solar.
“La incineración es una estafa, contribuye al calentamiento global y al cambio climático y es una grave amenaza para la salud pública”, afirman los miles de ciudadanos, médicas, técnicos, profesoras o ecologistas de todo el Estado, representados por más de cincuenta plataformas firmantes del manifiesto que articula la unidad de acción del movimiento estatal anti incineración.
Se trata de la Segunda Declaración de Ponferrada contra la Incineración y por el Residuo Cero, consensuada en la asamblea virtual celebrada por iniciativa de Bierzo Aire Limpio el pasado 4 de junio, y continuación de la firmada en 2018 por más de 50 grupos ecologistas o vecinales de toda la geografía española quienes “trasladan sus reflexiones y demandas al Ministerio para la Transición Ecológica, a todas las demás Administraciones afectadas, a la Fiscalía Especial de Medio Ambiente y a toda la sociedad”.
“Exigimos a las Administraciones —afirman— que no concedan más permisos de incineración o coincineración y que desarrollen alternativas para los residuos basadas en la Reducción, Reutilización, Reciclaje y la prohibición de lo No Reciclable, de modo que no conviertan a las cementeras ni a las centrales térmicas en incineradoras de residuos encubiertas”.
“La (co)incineración de residuos produce compuestos químicos tóxicos: furanos, Compuestos Orgánicos Persistentes, metales pesados, ftalatos (plastificadores), dioxinas, gases de efecto invernadero y gases ácidos que una vez liberados en la atmósfera pasando a las plantas, animales y personas, produciendo cánceres, disrupciones hormonales, problemas respiratorios y otras enfermedades”.
La Segunda Declaración de Ponferrada “hace propias las luchas y reivindicaciones de todos los afectados por la Colonización Energética (macro polígonos solares, eólicos, marinos o de cualquier otro tipo de macroproyectos industriales de producción energética que supongan la explotación indiscriminada y abusiva de nuestros recursos naturales”.
Los grupos firmantes denuncian “la instalación de macro parques eólicos y fotovoltaicos invasivos del territorio, agresivos contra sus habitantes y destructores de los ecosistemas boscosos y/o marítimos; así como las prácticas de incineración y coincineración de residuos y combustibles derivados de residuos, así como de la biomasa, que perjudican la salud, el medio ambiente y agravan el cambio climático”.
Finalmente, las distintas plataformas invitan a los ciudadanos/as a movilizarse en contra de todos los proyectos que atenten contra nuestra salud y a denunciar a todos los partidos, instituciones o Administraciones que apoyen o consientan la incineración y la colonización energética de nuestro territorio”.
La declaración de 2018 fue suscrita por plataformas de Alsasua, Benahadux y Carboneras (Almería), Montcada i Reixac, Madrid, Sant Feliu de Llobregat, Barcelona, El Bierzo, Asturias, Galicia, Bizkaia, Gipuzkoa, Sta. Margarida i Els Monjos, Buñol, La Garriga, Los Alcores (Sevilla), Córdoba, Niebla (Huelva), Morata de Tajuña y Mora (Toledo), Campo de Gibraltar y Bahía de Algeciras, entre otras, además de colectivos como Alternativa Verde por Asturias-EQUO, Amigos de la Tierra, ADEGA, Ecologistas en Acción, GAIA, La Olla del Bierzo, Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cantábrica, Rede Decrecemento y Tyto Alba.