[TRIBUNA] Cartografía berciana histórica
JAVIER LAGO MESTRE | Una de las fuentes históricas más curiosas es la cartografía. Los mapas no dejan de sorprendernos por su poder visual que impacta sobre nuestra memoria colectiva. La cartografía histórica fue una representación territorial de los diversos poderes (real, eclesial, señorial…). El poder simbólico de los mapas es semejante a otros, caso de los escudos, banderas, pendones concejiles, protocolo, ornato, privilegios escritos, etc. Toda esta variada simbología servía para reafirmar la jerarquización de los poderosos frente a los inferiores (vasallos, feligreses, siervos, pecheros…
Nos interesa analizar la presencia de un pequeño territorio como El Bierzo en la cartografía histórica. Como bien podemos suponer los mapas de la Edad moderna destacan los diversos reinos y provincias de la Corona de Castilla o del llamado imperio español. Otras referencias locales son los principales ríos, sierras y vías de comunicación, además de las ciudades y villas más importantes.
En 1486 los Reyes católicos crean la provincia berciana. Esta pequeña delimitación territorial e institucional no aparece claramente en los mapas más antiguos. Hay mapas en los que se incluye El Bierzo en la cuenca hidrográfica Miño-Sil y, por lo tanto, vinculada al reino de Galicia. Son los casos de los mapas de Abrahan Ortelius (1579), Otro tanto acontece con Paolo Forlani, en su mapa de 1560, donde presenta Castilla fuera de El Bierzo. Por supuesto hay que tener en cuenta que los mapas en este período solían copiarse unos a otros, con escasas aportaciones geográficas novedosas.
Otra constante cartográfica de los mapas del Antiguo régimen (siglos XVI al XVIII) es el tema de la frontera de reinos en El Bierzo. El profesor A. Regueira Rodríguez nos indica que “los límites con El Bierzo son para Ojeda muy confusos, resolviendo la indeterminación de esta frontera con una línea recta desde Puebla de Sanabria hasta el alto de Burbia, y equidistante de Ponferrada, en el reino de León, y Villafranca, en el de Galicia” (Los Geógrafos del Rey, 2010). Son numerosos los mapas en donde apreciamos la inclusión de El Bierzo occidental en Galicia, caso del Regnorum Hispaniae, de Joan Blaeu, de 1665 (con referencias a centros eclesiales).
Como es de suponer, los mapas no pueden concretar demasiado. Por eso tenemos que decir que en la provincia de El Bierzo había varios territorios dependientes administrativamente de Galicia. Valle de Valcarce vinculado con obispado de Lugo, Cacabelos con catedral de Santiago, Vilela con monasterio de Samos, Perexe con monasterio do Cebreiro, etc.
LOS MAPAS DEL SIGLO XVIII. En el siglo de las Luces aumentan los estudios de todo tipo, los cartográficos también. De ahí la abundancia de mapas que se realizan. Por supuesto en muchos de ellos siguen los comentados problemas con la delimitación de los reinos de Galicia y León en la provincia berciana. Gráficamente la separación entre El Bierzo y León es clara gracias a las montañas orientales.
Si analizamos las referencias cartográficas bercianas, vemos que son las principales villas las que siempre aparecen, Ponferrada, Cacabelos y Villafranca. En los mapas de los caminos de postas surgen otras localidades, por ejemplo en los de 1775 y 1786, Foncebadón, Molinaseca, Bembibre, Ponte Domingo Flórez, Ruitelán, A Faba, etc. Como referencias comarcales apaecen los topónimos Vierzo, Laceana, Cabreira, Valdeorras o Cervantes (Nicolás de Fer en 1707). Por supuesto, todos bien conocemos el mapa de la provincia de El Bierzo, de 1786 de Tomás López, que incluye comarcas vecinas. Este mapa nos singulariza claramente de León. Antes tenemos otra referencia expresa a la provincia berciana en un mapa de Valdeorras, de 1772, divulgado por el historiador Isidro García Tato.
Podemos catalogar como mapas autóctonos bercianos los que se refieren a las parroquias dependientes de la colegiata de Villafranca que se extendían por las vecinas comarcas de Galicia. Por cierto, esta abadía berciana estuvo exenta del poder del obispado de Astorga. Otro mapa del obispado de Lugo nos concreta sus feligresías en Valcarce (1768). Los pleitos territoriales son otra fuente cartográfica. Casos del mapa del conflicto por la devesa do Fabeiro (1771), entre el monasterio de Carracedo y el concejo de Ponferrada, donde apreciamos los lindeiros fijados por las partes en litigio secular. En la Chancillería de Valladolid encontramos otro mapa de Fabeiro sobre pleito por límites entre concejos vecinos. Incluso ya tenemos sencillos planos de nuestras villas de Ponferrada y Vilafranca, por mor de los informadores del mencionado cartógrafo Tomás López.
CARTOGRAFÍA DEL SIGLO XIX. No se puede negar que la geopolítica también influye en la elaboración de los mapas. En este sentido durante las guerras napoleónicas El Bierzo no siempre aparece en la cartografía. Recordemos que Francia concedía más importancia a sus ocupaciones de León y Astorga que al territorio liberado de El Bierzo, según sus intereses militares. Sin embargo, en el mapa de las prefecturas de España (1811) El Bierzo surge claramente delimitado. Destacadas estas curiosidades históricas, comentamos que en el siglo XIX los mapas tienen un gran desarrollo, por mor del avance de los conocimientos científicos (geografía, matemática…). La cartografía está más que nunca al servicio de los poderes, político, militar, económico, etc.
El nuevo régimen político liberal necesita ordenar el territorio. Así surgen las nuevas provincias, caso de la de Villafranca en la década de 1820. Como no podía ser de otra forma esta provincia es reconocida en los mapas con mayor precisión geográfica (Bauza 1822, Hall en 1828, John Dower 1831..). Y cuando esta provincia berciana es suprimida surgen nuevos mapas con el partido administrativo de Ponferrada (Malte Brun 1812, Depot Guerre France 1823, Monin Fremin 1835, 1846, 1855…). Los mapas de la provincia de León inciden en la diferenciación en dos partidos judiciales bercianos. En la cartografía militar apreciamos la reconocida zona militar de Villafranca. Todos ellos mantienen la identidad geográfica de El Bierzo de forma clara, a pesar de los variados intentos por suprimir nuestra especificidad política e institucional histórica.
Con la llegada del sistema político democrático de 1978, El Bierzo recupera su identidad institucional, por mor de la Comarca y el Consejo comarcal. Numerosos mapas se realizan para destacar El Bierzo frente a los territorios vecinos (turismo, Caixa Galicia, etc). Én los mapas de Castilla y León surge la Comarca berciana cada vez más, y cuando no es así, hay una clara intencionalidad política de negar nuestra identidad institucional. Incluso nuestra Comarca ya se coloca en algunos mapas de Galicia como reconocimiento de nuestra vinculación histórica y cultural.
O Bierzo, xullo de 2023.