Esta edición de la revista La Curuja tiene un sabor especial a Quintana de Fueros, pueblo del Bierzo Alto con el que Noceda siempre ha tenido mucha y buena relación.
En este número 29 de la segunda época se incluyen colaboraciones de Luis Segura, que compone poemas al lagar, molino y ermita de su pueblo de Quintana de Fuseros; del escritor Pepe Álvarez González, autor de Tiempos extremos, que nos introduce también en la historia de Quintana de Fuseros como un pueblo singular, y de la abogada Mari Cruz Álvarez Durández, también originaria de Quintana de Fuseros, que estremece al lector con un relato ambientado en su pueblo, Urdiales e Igüeña, que en cierto modo recuerda a los cuentos del escritor mexicano Rulfo.
En las páginas de este número se pueden encontrar además las colaboraciones del profesor e investigador taramundés-bembibrense Jovino Andina, que, en un texto bien documentado, nos acerca la historia de la luz eléctrica en Noceda.
Por su parte, el paisano y habitual colaborador Benjamín Arias Barredo nos habla del valle de Noceda y su relación con la minería; la escritora y profesora de Omaña Margarita Álvarez ofrece un bello cuento como homenaje a un pozo, que es esencia de vida; y el coordinador/editor de esta revista, Manuel Cuenya, rememora el encuentro literario de 2022 en el útero de Gistredo y la posterior velada, con la presencia entre otros del gran escritor Julio Llamazares.
La portada de este número es original de Jesús Madero, fotógrafo manchego residente desde hace años en Noceda del Bierzo; y el cierre de la edición lo hace el argentino-español Néstor Reyna Rondón con Décimas para El Bierzo.