Las obras de consolidación de Casa Gil arrancarán en la primera quincena de enero
La Fundación comparte su proyecto con los vecinos de Villafranca y pide más apoyo al amparo de la nueva Ley de Mecenazgo.
“Los vecinos y vecinas de Villafranca, y de todo el Bierzo, tenéis que ser los protagonistas de este proyecto: Casa Gil y el Jardín Romántico han llegado para quedarse”, exhortaron hoy Consuelo Álvarez de Toledo y Valentín Carrera a los asistentes al brindis navideño convocado por la Fundación Biblioteca Enrique Gil, para celebrar la reciente ayuda de 100.000 euros concedida por la Junta de Castilla y León y anunciar el comienzo de las obras de consolidación “en la primera quincena de enero”.
Con ese brindis concluyó la reunión extraordinaria del Patronato de la Fundación convocado en el número 15 de la calle del Agua de Villafranca —es decir, la casa natal de Enrique Gil y Carrasco— con un curioso formato: una sesión informativa, abierta a la ciudadanía villafranquina y a los medios de comunicación.
La reunión —con presencia también de los técnicos y constructores que ejecutarán la obra— permitió ofrecer detalles de los trabajos de consolidación de la fachada y los muros del edificio que se conservan actualmente “en bastante buen estado, a pesar de casi doscientos años de abandono”.
Según explicó el presidente de la Fundación Biblioteca Enrique Gil, “la consolidación es una actuación urgente para evitar la ruina del edificio y garantizar su estabilidad y seguridad; el proyecto fue aprobado en septiembre por la Comisión de Patrimonio y cuenta ya con la preceptiva licencia municipal. Además, para garantizar al máximo la seguridad de la fachada histórica, hemos hecho un estudio de geotecnia y un detallado y minucioso estudio de la estructura de apeo, es decir, un armazón metálico y su arriostramiento con un andamio estabilizador, lo que permitirá en un futuro próximo el acceso al edificio sin riesgo para los visitantes”.
La parcela de Casa Gil tiene una superficie de 172 metros cuadrados sobre los que se levanta el antiguo edificio, de tres plantas, con la fachada blasonada a la calle del Agua; y una huerta de 600 metros cuadrados que será el Jardín Romántico del Bierzo. Tras el desbroce que se hizo en verano, pagado por suscripción popular, retirando cinco contenedores de escombros, ahora toca conservar y restaurar todos los elementos constructivos (carpinterías exteriores, rejerías, elementos característicos de la fachada, etc.) y consolidar los muros y cerramientos existentes.
Colaboración al amparo de la Ley de Mecenazgo
Para completar este ambicioso proyecto —convertir Casa Gil en un “ecosistema romántico”, centro literario de Villafranca y de todo El Bierzo—, la Fundación Biblioteca Enrique Gil mantiene abierta su campaña de mecenazgo para recaudar fondos en la web o mediante aportación directa en la cuenta de la Fundación en la entidad Abanca.
“La nueva Ley de Mecenazgo, aprobada esta misma semana por el Gobierno, y que entra en vigor el 1 de enero de 2024 abre una extraordinaria ventana de oportunidad para sumar la ayuda de todos los villafranquinos y bercianos, pero también de las empresas, dentro y fuera de la comarca. La Fundación Biblioteca Enrique Gil es una entidad de interés social, sin ánimo de lucro, y, por tanto, todas las aportaciones tendrán importantes bonificaciones fiscales”, explicó el presidente de la Fundación.
“Durante doscientos años, la Casa Gil, y buena parte del Casco Histórico de Villafranca, han estado abandonados. Frente a tanta desidia, nuestro compromiso es abrir Casa Gil y el Jardín Romántico del Bierzo en junio de 2024, coincidiendo con las Edades del Hombre. Nuestra iniciativa no se limita a la casa natal del poeta, sino que impacta en un entorno muy degradado sobre el que, inspirada en la vida y obra de Enrique Gil, irradia una nueva savia arquitectónica, cultural, social, turística, un antes y un después en la vida de Villafranca”., concluyó Carrera.