[EL PUYAZO] Oleguer reparteix certificats d’ética
Olegario no se enteró de lo que pasó ayer. No me refiero a su pequeño mundo provinciano al que ha llegado desde Fornela para repartir certificados de ética. La noticia de ayer no es que Morala e Iván o Iván y Morala hayan tenido que ver como el toro de Vox se les escapa de los chiqueros, donde lo tenían controlado, y amenaza con salir al ruedo a montar la de Dios es Cristo.
Y no se ha enterado a tenor de una declaración apocalíptica sobre lo que le interesa: “El equipo de gobierno ha destrozado los cimientos éticos de la política”, ha soltado refiriéndose a Morala e Iván o a Iván y Morala. ¿Lo habrá pensado bien antes de lanzar es perla en un día como ayer? Nos habla él de ética, precisamente el día de la consumación fallida de la mayor felonía política vivida en este país desde que Carlos IV y Fernando VII vendieron España a Francia.
El asunto no le salió ayer a Sánchez porque se negara a cruzar las nuevas líneas que le exigía Junts, lo hizo porque sabía que con ese paso se le multiplicaban las posibilidades de desmontarlo del machito. Aún así él y los suyos votaron, en un ejercicio donde primaba la cartera sobre la ética, junto con una “constelación ética” tan legal como moralmente repugnante. Su careto lo decía todo de su contrariedad manifiesta, al verse privado de los siete votos que por su interés personal puro y duro no ha dudado en poner a la nación patas arriba. Todo lo demás son cuentos chinos.
Y mientras eso pasaba, al meritorio cabo de la fiel y muda infantería sociata no se le ocurre otra cosa que afear la conducta del equipo de gobierno de Ponferrada, con esa proclama desmedida y chunga, porque dos ciudadanos de Vox andan intrigando para asegurarse el cocido a cuenta del erario público.
Antes de repartir certificados, la reflexión que debió hacer el contrariado exalcalde de Ponferrada no era si Vox, y aprovecho para marcar distancia con esa secta, va camino de militarizar Ponferrada, sino si procede hablar tan pomposamente de ética que, tras el descarado apareamiento con Bildu, es mercancía caducada que no se la creen ni ellos.
Currito de Cortiguera