[CARTAS] La fachada del Lisboa
A Abraham García, cocinero y escritor,
pensando en su artículo ¡Vuelve, Buenaventura!, inspiración de este mío.
Está en la calle Jardines, frente a la Casa de los Alija. Fue hotel y ahora se hospedan las palomas. Tendrá muchas historias esta ruina. Una de ellas, fue allí donde intentó refugiarse Juan García Arias, alcalde en ese momento y cadáver antes de que terminase aquel mes de julio.
Hará cosa de unos meses, en la fachada de este edificio apareció una pintada: GIRÓN VIVE. Afortunadamente para la ortografía su autor le puso la tilde y todo. La “acción” se comentó. No mucho, seguro, pero nos consta que sí, aunque la mayoría de la gente no repara en ello o no supiera quien era el tal Girón, que como una especie de Mesías (no sé si en Cuaresma se pueden hacer estas metáforas) alguien reivindicaba que estaba vivo, que no había muerto. Al menos su ejemplo, su mito, su legado. Cada cuál que escoja su sinónimo.
Hace algunos días, otro autor, insatisfecho con la tilde o con la ortografía o con el estado ruinoso del lienzo, digo, del edificio, escribió encima: VIVA ESPAÑA.
Y me asalta la curiosidad:
¿Sabría el segundo autor quién era Girón? ¿Qué le llevó a ir a su casa o a un bazar chino para comprar pintura?
¿Cuál de las dos pintadas agradará más a las gentes del ayuntamiento, desde funcionarios a políticos?
No quiero hacer ningún magisterio, colocarme en ninguna tribuna a dar lecciones, pero, amigo segundo autor de pintadas callejeras, te invito a que te quites el impermeable ideológico (créeme que es bueno) y abandones el fanatismo que te ha llevado a ensalzar la viveza de España con tan pulso firme sobre el cemento portland.
Lea sobre Girón, un hombre pobre, desligado de heroicidades, un pobre hombre y mísero empujado como tantos otros a la fatalidad, al desgarro. No sería un santo ni estamos aquí para hacer apostolado de su causa pero no has pensado que a Girón le gustaría que viviera España, que le hubiera gustado vivir en una España más justa, menos mísera.
O, se me ocurre pensar…¿qué temes del legado de Girón? ¿No quieres que su recuerdo viva? ¿O en tu España viva no hay sitio para aquellos que aman al Girón? ¿Temes que su sólo ejemplo sea un relámpago en esta ciudad maquillada de miseria que sólo fue Ciudad del Dólar en los bares y los burdeles?
Gracias, porque nos has dado la oportunidad a todos de reflexionar sobre ello. VIVA GIRÓN y VIVE, ESPAÑA.
Ignoto del Bierzo