La Junta invertirá 2 millones para restaurar los hábitats del urogallo en Laciana y Alto Sil
En 2024 y 2025 se trabajará en la recuperación de la diversidad de especies vegetales de los montes de la cordillera Cantábrica.
La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio acaba de aprobar una inversión de 1.995.089 euros para la restauración y mejora del hábitat del urogallo cantábrico. El objetivo es el incremento de la diversidad estructural, tanto aérea como en el estrato arbustivo, y de la diversidad específica de las masas arboladas de presencia actual o de reciente desaparición del urogallo. El objetivo es mejorar la transitabilidad de las masas y la disponibilidad de alimentos, dotando a estos hábitats de una estructura en mosaico, con representación de variedad de ambientes favorables para el desarrollo de las distintas fases vitales del urogallo. Igualmente, estas actuaciones contribuyen a la reducción del riesgo de pérdida de hábitat a causa de los incendios forestales, haciendo las masas más resilientes a sus efectos.
La mejora de las masas forestales como hábitat de urogallo es una actuación prioritaria para contribuir a la recuperación de esta especie. El éxito de la recuperación del urogallo cantábrico y del resto de acciones previstas para la reversión de su estado de conservación requieren mejoras en el medio, de modo que la especie encuentre un medio lo más favorable posible para poder recuperarse y volver a ocupar las zonas que en un tiempo reciente ha abandonado.
El abandono del monte y de las actividades tradicionales de desbroces y extracción de leñas están suponiendo una densificación del bosque con la consecuente pérdida de diversidad estructural y hábitat adecuado para la especie. Se ha demostrado una relación clara entre cantaderos abandonados y densificación del bosque, por lo que recuperar estas prácticas mediante la selvicultura es crucial para disponer de un hábitat de calidad para la especie.
El objetivo en estos trabajos es permitir que la circulación del urogallo sea adecuada para facilitar, entre otros, el acceso al alimento, la detección de depredadores y la huída en caso de ataque. Las actuaciones se centrarán en el vuelo (ramas, troncos), en el suelo (cobertura estrato arbustivo o sub-arbustivo) o en ambos. Se busca igualmente asegurar la alimentación del urogallo en cualquier época del año y el estado de desarrollo del ave, y conseguir hábitats que faciliten su estancia a través de mejora de la visibilidad y protección de los depredadores y habilitación de zonas adecuadas para su exhibición durante el celo.
La superficie total de actuación será de 833 hectáreas en los términos municipales de Murias de Paredes, Cabrillanes, Palacios del Sil y Villablino. Concretamente, se ejecutarán trabajos de desbroces mecanizados en una superficie de 123 hectáreas y tratamientos selvícolas sobre coníferas y frondosas mediante la realización de clareos, podas, desbroces manuales y eliminación de restos en una superficie de 710 hectáreas.
De forma complementaria se desarrollará un estudio para determinar la evolución de las masas forestales en las áreas críticas de urogallo, analizando los diferentes parámetros y estudiando la evolución de la especie con la caracterización selvícola realizada.