Socialistas bercianos acuden a Ferraz para pedir a Pedro Sánchez que no dimita
Miles de personas se concentran frente a la sede central del PSOE para testimoniar su apoyo al presidente del Gobierno.
Unos 12.500 simpatizantes y militantes del PSOE se han congregado este sábado ante la sede central del PSOE en la calle de Ferraz, en Madrid, para respaldar a su líder, Pedro Sánchez, y pedirle que no deje la presidencia del Gobierno. Entre ellos se encontraban un grupo de militantes socialistas del Bierzo, que se desplazaron en un autobús que partió a las 6 de la mañanas desde Ponferrada.
Los seguidores han comenzado a reunirse desde primera hora de la mañana y bajo la lluvia, que más tarde dejó paso al sol, para presenciar la reunión del Comité Federal del partido, que se transmitió por pantallas y altavoces para que desde el exterior se puedieran escuchar las intervenciones de los dirigentes socialistas.
Los discursos se intercalaron en los exteriores de la sede con los gritos de los manifestantes: “¡No estás solo!”, “¡Pedro, quédate!”, “¡No pasarán!”, “¡Pedro, estamos contigo!”, “¡Presidente, presidente!”. Los dirigentes socialistas que participan en el comité han interrumpido sus intervenciones para salir a la calle junto a todas las personas que se han acercado a Ferraz para mostrar su apoyo a Sánchez.
Declaración de apoyo desde Ponferrada
La ejecutiva de la agrupación socialista de Ponferrada y las Juventudes Socialistas aprobaron este viernes, en reunión extraordinaria, una declaración de apoyo a Sánchez. “Los ataques que sufre nuestro presidente no tienen precedentes en la historia de España; unos ataques furibundos que tratan de deslegitimar su figura política y personal a lo que ahora se une los ataques a familiares de manera ruin y rastrera con la única finalidad de generar odio y crispación en la sociedad”, subraya el texto.
Añaden que “la fachosfera utiliza una nueva técnica para derribar al adversario político que no tiene ninguna relación con la política, una técnica basada en una campaña de bulos, falsedades y acoso contra los miembros de los dos últimos gobiernos de coalición y otras fuerzas progresistas e independentistas, coordinada y que se complementa con la tergiversación y manipulación, que cuenta con la connivencia de una parte del poder judicial y que atenta contra las bases mismas de la democracia parlamentaria”.