Morala se abre ahora a negociar la ordenanza de la ZBE con los grupos de la oposición
Vox afirma que si se aplica una norma restrictiva será por un pacto del bipartito con el PSOE y no por imposición de Europa.
El alcalde de Ponferrada, Marco Morala, ha declarado este miércoles su disposición al “diálogo y escucha” con el resto de partidos para poder retomar su proyecto de ordenanza y reglamento para la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) tras reunirse con los comerciantes y pedirles estos que lo hiciera. Tras ese proceso de negociación, adelantó, el asunto volverá a someterse al pleno.
Morala dice tener claro que Ponferrada tendrá ZBE “sí o sí” y que la propuesta por el equipo de Gobierno es la que los comerciantes consideran menos lesiva. Por ello, enfatiza que “vamos a intentar recuperar un diálogo con todas las fuerzas políticas para dar apoyo a esta ordenanza”, que los comerciantes quieren. “Es la que nos permite cumplir con Europa y tener una libertad de accesibilidad al centro que de otra manera no tendrían”, subrayó.
Mientras el PSOE mantiene la mano tendida a la negociación, Vox está llevando a cabo una activa campaña en las redes sociales presumiendo de que han conseguido evitar la implantación de la Zona de Bajas Emisiones en Ponferrada. También aseguran que «si se establece una ordenanza de ZBE más restrictiva en el centro de la ciudad, no es porque lo imponga Europa, es porque el equipo de Gobierno PP y CB habrá pactado otra vez con el PSOE».
«La verdad es que la única obligación viene porque el anterior Gobierno Socialista pidió en 2022 la subvención de 2,4 millones de euros para su proyecto devastador para el centro de la ciudad. Tal plan consistió en eliminar plazas de aparcamiento y convertir calles de un único sentido, cuyas consecuencias fueron dificultar el tráfico, la vida de los trabajadores y consumidores de los comercios. Todo por imponer su agenda ideológica contra el vehículo propio y así tener aceras más anchas para ver mejor los locales abandonados con se alquila y se vende«. explica Vox.
