Bierzo Aire Limpio recurrirá el «peligroso» proyecto de reciclaje de palas eólicas en Cubillos
El colectivo asegura que su objetivo es «evitar un grave riesgo para la salud humana y el medio ambiente del Bierzo».
Bierzo Aire Limpio ha a nunciadi este lunes que presentará recurso contra la autorización concedida por la Junta de Castilla y León al proyecto de Grineo para instalar una planta de reciclaje de aerogeneradores en el polígono del Bayo de Cubillos del Sil, por considerar que representa «grave riesgo para la salud humana y el medio ambiente del Bierzo».
«No plantea soluciones alineadas con la economía circular, como alargar la vida útil de los aerogeneradores, ni primar su reutilización (por ejemplo, en soluciones arquitectónicas como el puente de Aalborg), antes que el reciclaje, que consiste en tratar los materiales de forma que den lugar al fin de su catalogación como residuo y puedan ser empleados en otros usos en condiciones óptimas», critica el colectivo ecologista.
La propuesta de la empresa es convertirlos mayoritariamente en combustibles derivados de residuos (CDRs), destinados a la incineración. Según la reciente modificación de la autorización de la cementera Votorantin-Cosmos podrían quemarse en la factoría de Toral de los Vados las 18-500 toneladas al año de CDRs que produciría Grineo cuando las cementeras, recuerdan fuentes de la asociación ecologista, «no han sido diseñadas para incinerar residuos, sino para fabricar cemento (como su nombre indica) multiplicando así su peligrosidad».
Aire Limpio relaja que el investigador del CSIC Félix Antonio López, experto en reciclado de residuos, considera que «la combustión de esas aspas compuestas por fibras de carbono y de vidrio, reforzadas en algunos casos con poliéster, generaría químicos peligrosos y muy contaminantes para el medioambiente y el hombre”. Por esta razón está prohibido en Alemania, Austria, Países Bajos y Finlandia que el destino de este residuo sea la incineración.
La Junta no respeta el principio de precaución
«Pese a todas estas evidencias, la Junta de Castilla y León ha continuado la tramitación de estos residuos como no peligrosos y concede en su autorización ambiental no pocas prebendas, permitiendo que se lleven a cabo cortes de las palas simplemente bajo cubierta y dos paredes, no en cerrado, sin canalización ni filtrado, y ni siquiera monitorización», advierte el colectivo ecologista.
El Estudio de Impacto Ambiental tampoco contempla emisiones, ni riesgos de escapes, y ninguna afectación a la atmósfera ni a las aguas pluviales que conllevarían arrastres hacia los sumideros «que pudiera dar lugar a que acaben en los colectores sustancias incompatibles con el actual sistema de tratamiento del polígono industrial, únicamente una balsa de decantación», según el informe técnico emitido por el Ayuntamiento de Cubillos. Por toda medida, la Junta dicta en su autorización que «en caso de observarse emisiones de partículas se tomarán las medidas oportunas convenientes para su cerramiento y filtrado.” Y ““en función de los resultados, o de la existencia de quejas o denuncias se podrán modificar los requisitos o imponer nuevas condiciones”.
En resumidas cuentas, apostilla Aire Limpio en un comunicado, «la Administración competente, responsable de filtrar y archivar los proyectos potencialmente peligrosos para la salud de las personas, tal y como demanda el principio de precaución, deja en manos de la ciudadanía (que puede ser consciente o quizá no de estar sufriendo las consecuencias de la ausencia de medidas adoptadas, que puede detectar pasados meses o incluso años los daños sobre su salud de la autorización concedida) la imposición de condiciones a la empresa».
Desde Bierzo Aire Limpio recalcan que es la Administración la que concede las autorizaciones y, por tanto, «es su obligación velar por el cumplimiento de la normativa, la comprobación real de la inocuidad de las actividades proyectadas y en definitiva, es responsable de tomar las medidas que garanticen con certeza, que los procedimientos de evaluación ambiental están bien desarrollados, ya que es la seguridad y la salud de las personas lo que está en juego».