Críticas a la ubicación de las 20 viviendas sociales que construirá la Junta en Ponferrada
El PCE considera que el emplazamiento elegido «apesta a clasismo» y califica que «irrisorio» el número de pisos para jóvenes.
El Partido Comunista de España en el Bierzo (PCE) ha salido al paso este jueves paso de la propuesta de la Junta para construir 20 viviendas sociales en el entorno del Polígono Industrial del Bierzo (PIB) de la capital de comarca. Los comunistas plantean sus dudas sobre la compatibilidad urbanística del terreno elegido, ya que entiende que debería tratarse de una zona de equipamientos.
Desde la formación argumentan que la ciudad dispone de «numerosos terrenos urbanizables», muchos de ellos localizados «en el interior» del núcleo urbano. En este sentido, recuerdan que el Ayuntamiento cuenta con solares vacíos incluso en la Rosaleda. Por ello, la formación critica que se desplace la vivienda social al exterior de la ciudad y consideran que está decisión «apesta a clasismo». «O eso, o tienen muy mal gusto, y quieren que la ciudad sea una mezcla de solares insalubres y viviendas», apostillan. E
Ademas el PCE tilda de «irrisoria» una cantidad de 20 viviendas para una ciudad en la que destacan «problemas importantes» para el acceso a la vivienda y, en particular, para personas jóvenes. También remarcan que los inmuebles ofertados «no pasan de los 60 metros cuadrados» una superficie que les parece insuficiente para quienes apuesten por formar una familia. “¿Es este su apoyo a las familias y a la natalidad?”, se preguntan irónicamente.
Por otra parte, la organización denuncia las políticas de vivienda de la Junta en la comarca alegando que «no se puede llamar vivienda social» a inmuebles vendidos por «más de 100.000 €». En este sentido, los comunistas critican que desde la Administración se está «subvencionado» a promotores privados para construir vivienda pública que, posteriormente, venden «con amplios márgenes de beneficio». Por ello, la organización cree que debe apostarse por Bancos de vivienda «situados al margen de los empresarios».
“La vivienda es un bien de primera necesidad, un derecho humano, y por tanto se debe sacar del mercado y acercarla a la lógica del derecho humano, tanto en su construcción, que debería ser desarrollada por empresas públicas, como en su gestión, basado en criterios de necesidad y no de capacidad de compra”, concluyen.