La odisea de un camionero berciano que regresaba de Valencia tras sufrir las inundaciones
El conductor, que se encontraba en «precarias condiciones físicas y anímicas», fue inmovilizado y multado con 200 euros.
Un camionero berciano que regresaba a casa después de verse afectado por el temporal cuando se encontraba en Valencia fue inmovilizado este viernes en la A-6 cerca de Medina del Campo y multado con 200 euros por circular estando restringida la circulación para camiones, según ha denunciado este sábado Upaagtrans.
El conductor estaba regresando de Valencia, donde había pasado el miércoles y jueves anteriores en unas condiciones muy precarias, ya que se encontraba en la zona cero de la N-3 y se vio directamente afectado por las inundaciones. «Por lo tanto, estaba regresando en unas condiciones físicas y anímicas muy precarias», explica el colectivo.
La Dirección General de Transportes dictó una resolución para flexibilizar los tiempos de conducción y descanso de los conductores afectados por la dana para que pudieran salir de allí y llegar a sus domicilios un poco antes. Sin embargo, critica Upatrans, «la Dirección General de Tráfico, una vez más, se mostró insensible con los conductores de los camiones y no levantó las restricciones previstas, ni tan siquiera para aquellos que circularan regresando del infierno en que se convirtió Valencia».
«Seguramente la DGT encontrará una buena disculpa, pero ellos y nosotros sabemos que tuvieron tiempo de sobra para modificar las restricciones para aquellos conductores afectados por la DANA de Valencia, entre otras cosas, los paneles de señalización variable están para eso, pero la realidad es que, mientras la autoridad competente en materia de transportes fue sensible con la situación vivida por los conductores de camión, la Dirección General de Tráfico no mostró la más mínima sensibilidad no empatía», se queja la asociación.
En un polígono industrial, con todo cerrado y sin dinero
El agente que inmovilizó al camión, y por lo tanto a su conductor, lo hizo aplicando de manera estricta la norma, a pesar de que los signos que mostraba el camión y el conductor «eran evidentes para deducir de dónde venía, lo que no podemos dejar de reprocharle es que lo haya dejado en medio de un polígono industrial con todo cerrado y sin dinero, al haberse tragado un cajero su tarjeta al irse la luz en ese momento, ya que el conductor así se lo manifestó». Los agentes advirtieron al camionero de que no se moviera hasta las 15 horas y con una sanción de 200 euros.
Gracias a la intervención del 112 que atendió al conductor y al Ayuntamiento de Medina del Campo, que envió una patrulla de la policía municipal para trasladarlo al centro y le entregó un vale para poder comer –en el bar además de comida caliente también le proporcionaron calzado seco y ropa para mudarse– el conductor pudo ver aliviada su situación. Compañeros de profesión de la zona también acudieron a acompañarle en cuanto tuvieron conocimiento de su situación.
El delegado del Gobierno en Castilla y León, cuando fue informado de lo que estaba ocurriendo, se interesó por la situación del camionero incluso llegando a hablar directamente con él y siguió de cerca la evolución de los acontecimientos hasta que el afectado por esta odisea llegó finalmente a su casa en Ponferrada, seis horas después de lo que debería de haberlo hecho.
«Por supuesto que, más allá del testimonio del conductor, obran en nuestro poder las pruebas que corroboran lo aquí manifestado. En cualquier caso, estamos seguros que en algún recoveco de la norma se podría haber encontrado la excepción a aplicar al caso que nos ocupa, si esto no era un caso de emergencia y fuerza mayor, que venga Dios y lo vea. ¿Cómo es posible que ni DGT ni el propio agente se hayan puesto en el lugar del conductor?», se pregunta Upatrans.