La Ponferradina recorta su presupuesto a 4,1 millones tras perder 73.000€ la temporada pasada
No conseguir el ascenso pasa factura a la Deportiva, que encadena tres ejercicios consecutivos en números rojos.
La junta general de accionistas de la SD Ponferradina SAD examinará y aprobará el 20 de diciembre el balance de la temporada 2023/24, que arroja un déficit de 73.133,22 euros, encadenando así tres campañas en números rojos. El mal resultado económico se explica en parte por el coste que tuvo para las arcas del club la contratación de dos técnicos, sin conseguir el ascenso de categoría.
El importe neto de la cifra de negocio ascendió a 2.572.948 euros y los ingresos de explotación se situaron en 1.827.257 euros. En cuanto a los gastos, los de personal ascendieron a 3.136.820 euros, los de explotación se situaron en segundo lugar, con 2.423.105 y los aprovisionamientos costaron 441.874 euros. La amortización de inmovilizado supuso 435.103 euros y los gastos financieros 80.366.
El presupuesto para la actual temporada 2024/2025, en la que el club intenta de nuevo el retorno a la segunda categoría del fútbol profesional, se reduce a 4.181.000 en el capítulo de ingresos. En cuanto a los gastos, se presupuestan 4.170.000, lo que de cumplirse arrojarían un superávit a 30 de junio de 2025 estimado en 11.000 euros. El recorte es del 13,7% respecto a los 4.845.000 euros del presupuesto de ingresos del ejercicio anterior 23/24.
La parte del león del presupuesto de gastos se la lleva la partida de retribuciones de la plantilla deportiva y resto de personal de la entidad, con 2.077.000 euros (frente a los 2.158.000 que totalizaban estos capítulos la temporada pasada), a los que se suman 462.000 euros correspondientes a cargas sociales. El coste de los desplazamientos baja a 190.000 euros y los servicios exteriores aumentan ligeramente hasta los 803.000 euros, mientras para amortización de derechos de adquisición de jugadores se destinan tan solo 3.000 euros frente a los 100.000 de la temporada pasada. Los aprovisionamientos suponen 339.000 euros, con un apreciable recorte, y la amortización de inmovilizado se dota con 230.000 euros.
En cuanto a los ingresos, el primer lugar lo ocupan los de comercialización, con 1.206.000 euros, mientras las aportaciones de los abonados y socios (808.000 euros) son la segunda fuente de ingresos de la sociedad, por encima de la publicidad con 366.000. Los ingresos de competiciones oficiales suponen 124.000 euros, y los de retransmisiones aumentan a 258.000. Las subvenciones que prevé recibir el club suponen 560.000 euros, el arrendamiento del bar del Toralín aporta 23.000 euros (siete mil menos) que la temporada anterior y los beneficios por traspaso de jugadores ascienden a 600.000 euros.