De térmica abandonada a Museo de la Energía, sesión sobre la rehabilitación de la central
La Fábrica de Luz Museo de la Energía inicia las actividades de los 100 años de la instalación con una sesión dedicada a la rehabilitación de la primera central termoeléctrica del país.
Así, este jueves 6 de 18 a 19.30 horas y con el título ¿Por qué La Fábrica de Luz es como la ves? De térmica abandonada a Museo de la Energía, esta sesión inaugural contará con unas ponentes de excepción. Esther Aparicio, directora del programa de creación del Museo hasta 2012, y Elena García, arquitecta durante la fase de rehabilitación, serán las encargadas de explicar y profundizar en los aspectos que llevaron a convertir la antigua térmica de Ponferrada en el Museo que hoy alberga. La sesión tendrá lugar en la cafetería del Museo, es gratuita y de entrada libre hasta completar aforo.
Esta actividad se enmarca en la programación que conmemora los 100 años de la entrada en pleno funcionamiento de la antigua central de la Minero Siderúrgica de Ponferrada (MSP). Con este motivo, a lo largo de 2020 La Fábrica de Luz lo celebra con una programación específica centrada en la difusión del patrimonio industrial y, concretamente, en la memoria de la central.
El sábado 8 tendrá lugar la actividad Los talleres del Museo: El triángulo de la combustión. Los participantes realizarán divertidos experimentos para conocer qué elementos son necesarios para una buena combustión. Este taller está dirigido a público familiar, aunque los menores de 6 años deberán acudir acompañados.
Continuando con las proyecciones asociadas a la exposición Tracks Memory. Iconos de la memoria industrial, el sábado y el domingo tendrán lugar las proyecciones del documental Un encuentro. Fábrica de San Isidro, Granada. Se trata de un cortometraje documental que relata la historia de la ocupación de la antigua Fabrica de Azúcar de San Isidro, a las afueras de Granada, por su propio arquitecto y cómo establece su estudio en la misma torre de la alcoholera. Dirigido por Juan Sebastián Bollaín en 2009, este breve relato resulta significativo para entender una trayectoria marcada por la atención del oficio a su contexto histórico y a su patrimonio.