El derribo de las carboneras, pendiente de definir la actuación urbanística en la zona
El alcalde mantiene conversaciones con los vecinos, pero reconoce que no hay una decisión tomada y tampoco ninguna previsión en los presupuestos de 2020.
Ninguno de los cinco alcaldes que gobernaron Ponferrada desde 1977 ha conseguido demoler las carboneras de la calle Ramón González Alegre, cuyo deterioro y suciedad es objeto de preocupación para las asociaciones vecinales del barrio y que están situadas cerca del centro de salud, del instituto Europa y de la residencia de mayores.
Interpelado sobre esta cuestión, el actual regidor aseguró que no se ha llegado todavía a una decisión sobre si se eliminarán en su totalidad en favor de una «actuación urbanística», si se conservarán todas o se alcanzará un punto intermedio.
Respecto a esa futura actuación urbanística, el PRB viene proponiendo desde hace más de una década la urbanización de la zona, una vez retiradas las casetas, para crear una zona verde y aparcamientos. La anterior alcaldesa, Gloria Fernández Merayo, pidió la colaboración de la asociación de vecinos del Temple y La Estación para eliminar las chabolas y levantar en ese terreno una zona de ocio con actividades orientadas sobre todo a las personas mayores.
Sin avanzar nada sobre la idea que baraja el tripartito, Olegario Ramón desveló esta mañana –durante la inauguración de las obras del plan de accesibilidad del Temple– que se está hablando con los vecinos y que, sea cual sea la decisión final, no contará con una partida en los presupuestos de este año, que irán a pleno a finales de este mes de febrero «siempre que no se presenten problemas de última hora con los informes».
De momento, el regidor dejó entrever que se les entregarán en breve a los grupos de la oposición, con los que ha mantenido reuniones para conocer sus propuestas. Las cuentas, admitió, no incluirán “grandes novedades” pero sí pretenden “marcar líneas de actuación para el futuro de la ciudad” y su cuantía global se situará en el entorno de la de los últimos presupuestos aprobados por el consistorio, que ascendieron a 55,8 millones de euros.