Ramón niega vulneración de derechos y reprocha a CCOO el tono de su crítica
El alcalde mantiene sus reproches a la demora del sindicato en presentar las alegaciones al presupuesto, un día antes de la finalización del plazo.
El alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, ha respondido este viernes al comunicado emitido ayer por CCOO respecto a las alegaciones formuladas por el sindicato a los presupuestos municipales lamentando «el tono de dicha comunicación». En su opinión, «se podría decir lo mismo sin necesidad de recurrir a expresiones perfectamente evitables, más propias de la confrontación política que de las relaciones entre un alcalde y el representante de un sindicato en el Ayuntamiento».
Ramón se muestra «sorprendido y preocupado» por la presentación de esas alegaciones y asegura que el Ayuntamiento no está vulnerando los derechos de información y consulta «del sindicato mencionado ni de ningún otro», esgrimiendo como argumento dos informaciones previas remitidas sobre la incorporación del personal de la empresa recaudadora del consistorio.
El alcalde mantiene sus reproches a la demora del sindicato en presentar las alegaciones al presupuesto, un día antes de la finalización del plazo habilitado para hacerlo, provocando un retraso en la entrada en vigor del mismo «en un momento en el que es imprescindible para hacer frente a las necesidades de inversiones que genera la pandemia del covid-19».
Por último, Olegario Ramón se muestra firme en sus declaraciones respecto a la excepcionalidad de las alegaciones presentadas por CCOO, considerando que «haberlas presentado en 2015 y 2016 no puede considerarse un ejercicio habitual, ya que durante los gobiernos municipales del Partido Popular hasta el año 2013, que no fueron precisamente tiempos de ejemplaridad en el acceso a la función pública, no se presentaron dichas alegaciones».
El comunicado del alcalde finaliza recordando que el equipo de gobierno apoya el control sindical «que se ha efectuado desde el 12 de marzo de 2020» y «confía» en que «se haya hecho también antes» de esa fecha. «Ese control de las fuerzas sindicales, bien ejercido, evita arbitrariedades, clientelismos, acceso a la función pública de familiares y amigos, ascensos vertiginosos injustificados y otro tipo de tropelías. Este equipo de gobierno intentará por todos los medios que esas cosas no ocurran, aunque pueda parecer novedoso en la casa», recalca.