El nuevo alcalde de Cacabelos ‘heredará’ una multa coercitiva por una licencia ilegal
El PP advierte al futuro equipo de gobierno de la obligación de ejecutar una sentencia dictada por el Juzgado Contencioso Administrativo número 1 de León en relación con un edificio de la calle Torano Nuovo.
A 72 horas de su investidura como alcalde con los votos de PSOE, IU y SxC, el Partido Popular ha advertido a Junior Rodríguez de la «herencia envenenada» que recibirá del «tripartito prevaricador» encabezado por Sergio Álvarez de Arriba.
Los populares se refieren en concreto a la ejecución forzosa de la sentencia que anuló la licencia concedida para levantar el edificio Roma, en la calle Torano Nuovo (antes Alférez Provisional), un largo y enrevesado pleito judicial que se saldó con una resolución dictada en marzo 2017 por el Juzgado Contencioso Administrativo número 1 de León contra el que ya no cabe recurso.
«Después de utilizar todos los recursos públicos y jurídicos disponibles por el consistorio, en la defensa de intereses espurios frente a la flagrante vulneración de los derechos de unos ciudadanos», apunta el PP en un comunicado, la sentencia obligaba al Ayuntamiento a iniciar un expediente de restauración de la legalidad y su consecuente expediente sancionador.
Sin embargo, apostilla el edil popular José Manuel Cela, «el agónico gobierno municipal tripartito ha usado todas las triquiluelas legales posibles e imposibles para evitar, a costa de todos los ciudadanos del municipio, el cumplimiento de la sentencia». Esta actitud habría provocado, subraya el PP, que el tribunal ordene la efectiva ejecución de la sentencia «bajo apercibimiento de multas coercitivas, a título personal, contra el Alcalde de Cacabelos». Y desde el sábado el regidor será el socialista Junior Rodríguez, que habrá de enfrentarse de inmediato a su primera patata caliente.
«Nuevamente, esta es otra parte de la envenenada herencia del prevaricador Sergio Álvarez y el Tripartito –PSOE, IU y ACC (Podemos)– que lo apuntalaron estos 4 años; herencia que se revela plagada de ilegalidades que tendrá que asumir su sucesor por culpa de su obsesivo ocultismo con las sentencias judiciales adversas, por su sectarismo en la defensa de los intereses individuales frente el interés común y por su marcado autoritarismo en la forma de gobernar, que le empujó a gastar ingentes cantidades de fondos municipales en la defensa de una gestión fracasada, estéril y plagada de irregularidades», concluye el PP.