El PP constata la «preocupación» de los colegios concertados por la ‘ley Celaá’
Morala mantiene una reunión telemática con los centros y reivindica una educación «tan plural y tan libre como nuestra sociedad».
El portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Ponferrada, Marco Morala, ha mantenido una videoconferencia con los representantes de todos los colegios de educación concertada de Ponferrada. En ella ha adelantado algunas de las medidas que está adoptando el Partido Popular durante la tramitación parlamentaria del proyecto y las que piensa poner en marcha si finalmente se aprueba en el Senado como está previsto por el gobierno.
“En Ponferrada hemos tenido siempre una adecuada convivencia de la enseñanza pública, verdadera garantía de servicio público, y de la concertada, a su vez garantía de libertad de elección de las familias. Enfrentarlas es un error político de graves consecuencias culturales y sociales. Cualquier ley educativa debería contar con un consenso muy superior al actual enfrentamiento y debería hacerse con la participación y la opinión de la comunidad educativa en su conjunto y no sólo con una parte”, explica Morala en un comunicado.
En la videoconferencia no solo se ha transmitido la posición sin fisuras del PP, sino que «fundamentalmente se ha escuchado, escuchado su preocupación, escuchado sus esperanzas para mantener una educación de calidad, escuchado su temor a una creciente ideologización de la gestión educativa».
Morala ha hecho hincapié en los motivos que sustentan la oposición a la Ley Celaá: “Cuando una ley se hace contra los padres, contra el derecho de las familias a escoger modelo y colegio para sus hijos, cuando se hace desde el sectarismo de imponer a los alumnos los valores éticos de una parte sola de la sociedad española y ponferradina, cuando pretende imponer un modelo no laico sino laicista, cuando se hace contra los colegios, para asfixiar económicamente a la concertada, cuando no tiene en cuenta las necesidades de los niños con discapacidad, cuando fomenta la mediocridad y cuando acaba con el español como lengua vehicular en toda España para vender ese patrimonio mundial que es nuestra lengua a los nacionalistas a cambio de su apoyo para mantener el gobierno Sánchez, la respuesta del PP, con el respaldo de millones de ciudadanos no puede ser más que no a la Ley Celaá”.