La parroquia de San Antonio colocará una placa en homenaje al sacerdote Francisco Beltrán
El Ayuntamiento de Ponferrada ha autorizado la colocación de una placa conmemorativa a los pies de la iglesia parroquial de San Antonio como homenaje a la persona de Francisco Beltrán Beltrán y se ha sumado al «reconocimiento de los méritos académicos y profesionales» que concurren en el sacerdote fallecido hace poco más de un año, «así como su labor, entrega y servicio a los vecinos de esta ciudad».
Francisco Beltrán Beltrán, fallecido el 18 de septiembre de 2019 a los 90 años, fue párroco de San Antonio durante los años del tardofranquismo y la Transición, hasta su jubilación en 2004, intérprete de las teorías aperturistas del Concilio Vaticano II y colaborador del movimiento obrero. Formó parte del equipo de cinco clérigos seleccionados por el cardenal Herrera Oria para liderar la Iglesia cuando llegara la democracia.
Hombre de una sólida formación intelectual, y no solo por sus estudios de Teología, Licenciado en Derecho y Sociología, ejerció como abogado y fue profesor en institutos de Ponferrada y en la antigua Escuela de Magisterio. Pero sobre todo era una persona de una gran humanidad y comprometida con su tiempo. Luchó contra el franquismo, organizó las ramas obreras de Acción Católica –de las que salieron no pocos dirigentes políticos y sindicales– y fue uno de los sacerdotes que asesoraron a monseñor Tarancón.
La presencia y el trabajo de don Francisco para unos, Beltrán para otros o simplemente Paco, también se hicieron notar en la organización de Cáritas Interparroquial, en la creación de Proyecto Hombre, en el Instituto de Estudios Bercianos –donde formó parte destacada del sector progresista que contribuyó a modernizar su imagen–, en la Fundación Manuel Fustegueras Valdés, donde ejerció durante algún tiempo como secretario, así como en la Hermandad de Donantes de Sangre y en la Asociación de Amigos del Camino de Santiago.