La plantilla y la afición celebran el ascenso por todo lo alto
Después de la celebración en El Toralín, en la que participaron activamente los futbolistas de la plantilla, la afición se trasladó a la plaza Julio Lazúrtegui para continuar las fiesta.
Lo jugadores de la Ponferadina celebraron el ascenso por todo lo alto, primero en el campo con la afición y después en la intimidad del vestuario, donde Carlos Bravo perdió su barba. Ya lo había advertido, con unas palabras que tenían algo de premonitorias, cuando llegó en el mercado de invierno a la Deportiva: «Cuando ascendí con el Conquense me la afeité y no me importaría repetirlo”. Deseo cumplido.
«Este ascenso es especial por los años complicados que llevábamos en Segunda B. Llevo tres de tres ascensos y estoy muy contento. Ahora a disfrutar con nuestra afición», reflexionó Yuri de Souza en la sala de prensa con la cabeza pintada de blanquiazul. Otro capitán, Ríos Reina, apuntó por su parte que «hay que disfrutar del día de hoy, un ascenso no se vive todos los días». Isi, que con su extraordinario rendimiento y sus goles en la fase de ascenso ha contribuido poderosamente a cubrir el objetivo, aseguró que «seguramente el secreto de esta plantilla es que es una gran familia».
La afición blanquiazul, que no se cansó de vitorear a los suyos en el estadio, se trasladó posteriormente a la plaza Julio Lazúrtegui para seguir festejando un ascenso que en los próximos días tendrá otras celebraciones antes de que los jugadores inicien las vacaciones y se comience a planificar la nueva temporada lejos del pozo de la Segunda B.
Reportaje gráfico: JLT