[REVISTA] Ideas de bombero para camaleones que marean perdices
En estos tiempos de extrema y mojigata corrección política ha caído en desuso la expresión ‘Tener ideas de bombero’, pero conviene saber que sus ideas pueden ser tan buenas (o tan malas) como las de cualquiera.
A lo mejor en la nueva hornada de bomberos de Ponferrada incluso cuentan con alguno capaz de asesorar desde la cercanía (¡al gobierno de la nortada con dilemas éticos!) a una concejala que no se ha caracterizado precisamente por tener muchas ideas, ni buenas ni malas. Ideas de bombero le deben de parecer también a Olegario Ramón las sugerencias de la oposición para los presupuestos. Lo decimos porque, después de pedirles que colaboren de forma constructiva, cuando presentan sus propuestas las despacha con eso de El alcalde de Ponferrada pide a la oposición que no “maree la perdiz” con los presupuestos.
Seguimos a la espera de lo que dicte el Tribunal Supremo acerca de las alegaciones de los Trumpianos y tramposos al recurso del Gobierno contra la burda vulneración del decreto del estado de alarma, con una propina de dos horas en el toque de queda que, a la vista de los datos, no ha servido para nada. Total, cuando resuelva ya habrá pasado el tiempo que quería la Junta covidiana. Mientras tanto, nos entretenemos con las declaraciones del inefable vicepresidente naranja (de momento, que al camaleónico personaje no le importaría cambiar de color con tal de mantener la poltrona): Igea ve una «ensoñación» imperialista del BNG la propuesta de provincia del Bierzo. No ha entendido nada.
En el Circo Máximo Covidiano cada cual ha querido llevar el agua a su molino
Se pregunta con razón Eva María Arias: ‘¿Por qué se investiga tan rápido en COVID y no en cáncer?’ Estos días también hemos leído que La covid retrasa el diagnóstico de cáncer de unas 55.000 personas. Más datos sobre el Cáncer, otra ‘pandemia’ que supera las 1.500 muertes cada año en León. No es descabellado suponer que un tercio de esas muertes se han producido en el área de salud del Bierzo y Laciana. Para los amantes de las estadísticas siniestras: el balance de la terrible pandemia de la covid, a punto de cumplirse un año de su inicio oficial, es de 343 muertos… y más de 8.300 curados. Pero sale todos los días en la tele, a todas horas y no se habla de otra cosa.
En el Circo Máximo Covidiano cada cual ha querido llevar el agua a su molino y/o sacar de la epidemia el mayor provecho posible. Repasemos algunas de las órdenes y recomendaciones: usa mascarilla (y ya no les vale cualquiera, llegará el día en que nos dirán incluso la marca), compra por internet, teletrabaja, estudia a distancia, paga con tarjeta, instala medidores de CO2, utiliza determinadas aplicaciones, vacúnate, no fumes, no hables en el autobús, no salgas de noche, ventila la casa, no te pares en la calle… Incluso a que bajemos la tapa del retrete nos han instado con aires de autoritaria gobernanta.
Y en esas estamos con la disculpa de sobrevivir. Pero como nos advierten en ¡OVIDIO! CARTA DE UN EXILIO, «sobrevivamos a toda costa y no nos quedará nada con lo que celebrarlo».