Podemos exige a Endesa que cumpla sus promesas de inversión en el Bierzo
La formación morada denuncia que la eléctrica «no ha presentado ninguna alternativa para la reindustrialización de una comarca a la que le debe todo», a menos de un año para el cierre de Compostilla.
«Incluso en la aplicación del acuerdo firmado para recolocar al personal están siendo injustos. Según transmiten los representantes sindicales, Endesa está enviando a sus trabajadores más jóvenes a lugares alejados como Canarias o Melilla. Esto es intolerable», explica Podemos en un comunicado.
La convocatoria de un concurso de ideas de proyectos para ser llevados a cabo por cualquier interesado significa para Podemos que la eléctrica «no quiere mojarse y delega responsabilidades propias en terceros». Lorena González, añade que «para más inri, nos hemos enterado por la prensa de que uno de los proyectos prometidos para el Bierzo, el almacén de material para renovables, al final se queda en As Pontes. Nos están tomando el pelo».
«12 meses es lo que queda para el cierre de Compostilla y creemos que es momento de que Endesa, el Gobierno y la Junta de Castilla y León se vuelquen en trabajar codo con codo con todos los agentes sociales para buscar proyectos de futuro para el Bierzo tal como se hizo, por ejemplo, con los acuerdos que se firmaron entre la Junta, Endesa y las fuerzas con representación sindical que, aunque no dieron todo el resultado esperado, trajeron empresas como LM que a día de hoy sigue siendo un polo de empleo importante», señala la portavoz de Podemos en el Ayuntamiento de Ponferrada.
«La comarca sigue desangrándose, perdiendo empleo y población. Las empresas auxiliares siguen sin ninguna solución ni por parte de Endesa ni por parte de las administraciones, ¿dónde está la transicion justa?», se pregunta González.
Además, Podemos remarca que «en la cuenta atrás para el cierre de nuestra central, los trabajadores despedidos en los ERES, siguen en situación de desempleo, los trabajadores en activo siguen sin ningún futuro y los trabajadores más mayores, los cuales llevan 30 años dando su vida a esta central, están totalmente desamparados ya que, tras el cierre, se verán en una situación muy delicada, debido a la difícil inserción laboral de este colectivo».