La Junta adelanta que el lunes se levantarán las restricciones extraordinarias
Los gimnasios y centros comerciales podrán abrir sus puertas, y se permitirá consumir en mesa en el interior de los bares.
Tanto el consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, como el de Presidencia, Ángel Ibáñez, han asegurado este martes que las medidas extraordinarias vigentes en la Comunidad por la situación sanitaria derivada de la covid-19 quedarán sin efecto a las 00.00 horas del lunes, 8 de marzo.
Castilla y León pasará ese día a la fase cuatro de desescalada, lo que permitirá recuperar determinada actividad económica y social. En concreto, se podrá reabrir el interior de la hostelería y la restauración, bajo la normativa publicada en el Boletín Oficial de Castilla y León el 4 noviembre, en el que, entre otras cuestiones, se prohíbe el consumo en barra y se limita el aforo a un tercio del total.
Asimismo, el próximo lunes será posible la reapertura de centros comerciales y otras actividades de ocio o deporte, así como los gimnasios, aunque también lo harán con limitaciones de aforo y las medidas adicionales ya conocidas. No obstante, el toque de queda a las 22 horas y el cierre perimetral de la Comunidad Autónoma seguirán vigentes.
La Junta prevé que en esa fecha la ocupación total de las unidades de cuidados intensivos que este martes se encuentran en torno al 39 por ciento, haya descendido al 35 por ciento y, por lo tanto, pueda comenzarse a relajar las medidas, tal y como se decidió en el Consejo de Gobierno del lunes. Una vez se haga efectiva la primera fase de desescalada, se evaluará la incidencia cada 14 días y, si la evolución es favorable, cada provincia irá bajando escalones en función del nivel de riesgo.
Mientras la Comunidad se dirige a este nuevo proceso de desescalada, desde la Junta destacan el avance de las vacunaciones «con la esperanza final de acabar con la pandemia». En este sentido, subrayan que Castilla y León es la segunda Comunidad en vacunación, un dato en el que confían de cara a seguir pasando al resto de niveles conforme al semáforo que rige las medidas de desescalada.