Concentración en Ponferrada contra la petición fiscal en el juicio a la ‘manada de Manresa’
El manifiesto leído por las organizaciones convocantes reclaman que se modifique el Código Penal y que se apliquen los convenios internacionales que obligan a una mayor protección de mujeres y niñas contra la violencia.
Un centenar de personas han respondido esta tarde en la plaza del Ayuntamiento de Ponferrada al llamamiento de la Plataforma contra las violencias machistas Bierzo y Laciana para mostrar su repulsa ante la calificación de los hechos por parte de la fiscalía en el juicio a la conocida como manada de Manresa.
Queremos justicia. No es abuso, es violación es el lema de esta acción con la que las organizaciones feministas han querido mostrar su rechazo a la decisión del ministerio público, que ha calificado como abuso y no como violación la agresión sexual a una niña de 14 años «violada por 6 hombres y otro que miraba mientras se masturbaba en lugar de ayudar a la víctima».
La Plataforma contra las violencias machistas del Bierzo y Laciana ha querido lanzar con la protesta de esta tarde un mensaje «alto y clara». Y es que, recalca el texto leído en la plaza del Ayuntamiento en presencia del alcalde y varias concejalas, «vamos a continuar en las calles, día tras día, luchando por nuestros y libertades, y nadie nos va a callar».
Tras recordar que «el único culpable de una violación es el violador», el manifiesto pide «dejad de juzgarnos a nosotras, nosotras somos las agredidas» y concluye con dos gritos que se vienen repitiendo ante las agresiones a mujeres: «Escucha, hermana, aquí está tu manada. Hermana, yo sí te creo. No es abuso, es violación».
La víctima declara en el tribunal que se sintió intimidada
“Me sentí intimidada por la pistola (de fogueo) y por ellos”, explicó ante el tribunal este lunes la víctima en la primera sesión del juicio que continuará el viernes. La chica revivió el ataque sexual mútiple que padeció el 29 de octubre del 2016, cuando tenía 14 años, durante una fiesta en una fábrica abandonada de Manresa.
La víctima, que ahora tiene 17 años, admitió, de entrada, que de muchas cosas no se acordaba (iba bebida y había fumado marihuana), pero que tenía “flashes” de los momentos en que abusaron de ella. Así reconoció la agresión sexual de tres de los seis acusados de abusos, aunque precisó que una amiga le explicó al día siguiente que lo hicieron todos.
Una amiga de la afectada ofreció en su declaración ante el tribunal más detalles de la agresión. “Nos pusimos a beber y a fumar. Bryan se llevó a la chica a la caseta. Al cabo de un rato salió y señalando el reloj me dijo: mira cada 15 minutos uno. Era para que se la tiraran Y se fueron todos”, subrayó. Los procesados, según su versión, fueron dirigiéndose a la caseta donde estaba la muchacha.