La Junta prescinde de profesionales sanitarios mientras Igea advierte de los malos datos
El vicepresidente asegura que los indicadores sobre la evolución epidemiológica en la Comunidad «continúan deteriorándose».
¿La situación epidemiológica de Castilla y León en relación con el coronavirus es preocupante? Según para qué. Para los responsables de la Junta y de ayuntamientos como el de Ponferrada –donde todos los indicadores evolucionan favorablemente desde hace días– sin duda lo es para mantener las restricciones. Sin embargo, no parece que lo sea a la hora de prescindir de profesionales sanitarios como denuncian los sindicatos.
UGT de Castilla y León ha asegurado este lunes que la Consejería de Sanidad “ha vuelto a tropezar con la misma piedra” tras la decisión de cesar a aquellos profesionales que terminan su contrato el 31 de marzo. Y es que, destaca Miguel Holguín, secretario de Sanidad de UGT Castilla y León, “hace casi un año, el 17 de abril de 2020, al final de la primera ola, ya denunciamos lo mismo, lo que se tradujo en un déficit de personal para atender la segunda ola”.
Muchos de estos sanitarios llevan un año encadenando contratos precarios en plena crisis sanitaria, por lo que su cese, según Holguín, “va a tener dos consecuencias terribles: por un lado, y en el mejor de los casos, se abre una guerra terrible entre las diferentes gerencias para robarse profesionales lo que repercutirá negativamente, como casi siempre, en las provincias con mayor déficit de personal y por otro lado, y aún más peligroso, que al estar disponibles sean llamados por otras comunidades con mejores condiciones laborales y salariales lo que se traduzca en un éxodo de estas profesionales tan necesarias para lo que está por llegar, la cuarta ola”.
Unas horas antes de esta queja sindical, el vicepresidente de la Junta y portavoz, Francisco Igea, advertía a través de las redes sociales de que todos los indicadores sobre la evolución epidemiológica en la Comunidad «continúan deteriorándose», una apreciación que utilizaba para pedir que se eviten aglomeraciones y se mantenga la distancia de seguridad y el uso de la mascarilla.
Igea recordaba en su mensaje que más de 400 personas continúan ingresados en los hospitales de la Comunidad, de ellos 117 en las unidades de cuidados intensivos, y lo acompañaba con una imagen con los datos de la incidencia acumulada por provincias, de la ocupación hospitalaria y del nivel de alerta de cada una de ellas.