Publicadas las ayudas a la reestructuración y reconversión de viñedo
Incluyen los trabajos realizados por el propio viticultor en el arranque, plantación o puesta de la protección contra conejos.
La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural ha publicado en el Boletín Oficial de Castilla y León la Orden que convoca la ayuda a las solicitudes de reestructuración y reconversión de viñedos en la Comunidad de Castilla y León en las campañas vitícolas 2021/2022 y 2022/2023. El plazo para la presentación de las solicitudes finaliza el próximo 29 de abril.
Estas ayudas se publican en un contexto de restricciones, que se mantienen desde el estado de alarma impuesto por el Gobierno mediante el Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, para hacer frente a la pandemia de COVID-19, y que ha llevado a que los operadores del sector vitivinícola sigan inmersos en una grave perturbación económica y sigan enfrentándose a unas dificultades excepcionales.
Por tanto, en esta convocatoria anual de ayudas se mantienen las especiales circunstancias derivadas de la crisis sanitaria ocasionada por la covid-19 de la convocatoria del año pasado, recogidas en los reglamentos de la Unión Europea y en los reales decretos a nivel nacional en materia de frutas y hortalizas y vitivinicultura.
Al igual que en la anterior convocatoria, por un lado, los viticultores podrán aplazar sus labores, sin ocasionarles ninguna incidencia económica ni penalización posterior en la tramitación de sus expedientes, y por otro, se beneficiarán de un mayor porcentaje de ayuda de reestructuración y reconversión de viñedos, llegando al 60% de su justificación.
Esta Orden de convocatoria de ayudas en Castilla y León va a permitir que se puedan realizar reimplantaciones, reconversión varietal y/o mejora de las técnicas de gestión de viñedos, siendo esto último para aquellos viñedos plantados con anterioridad al 1 de agosto de 2019.
Para ello, los viticultores que deseen plantar viñedo y optar a las ayudas podrán hacerlo mediante dos opciones: la primera, con la conversión de los derechos vigentes hasta 31 de diciembre de 2025, como máximo, en autorizaciones de plantación y la segunda, arrancando viñedo viejo propio para así obtener la autorización de replantación para el nuevo viñedo.
Como novedades principales están la actualización de los importes de subvención para adaptarlos al mercado; la limitación que tienen los beneficiarios para solicitar las modificaciones de las operaciones inicialmente aprobadas, previamente a la solicitud de pago final, a más tardar el 31 de mayo de la campaña correspondiente; y la regulación de la subrogación de los derechos y obligaciones derivados de la aprobación de la solicitud de ayuda a un nuevo viticultor.
En esta convocatoria se mantiene la subvención de los trabajos realizados por el propio viticultor en las acciones de arranque, plantación, puesta de la protección individual contra conejos y los trabajos para instalar la espaldera y para la transformación de vaso a espaldera y la reconversión varietal; y se permite la renuncia a la ayuda dentro del mes siguiente a la notificación de la resolución aprobatoria de la ayuda.