Unicaja cierra en el Edificio Minero y reduce a cuatro sus oficinas en Ponferrada
Los trabajadores serán recolocados en otras sucursales de la entidad, que seguirá operando en Lazúrtegui, San Antonio, Cuatrovientos y Flores del Sil.
La reestructuración bancaria que persigue el objetivo de reducir oficinas para priorizar las gestiones a través de internet continúa imparable y todas las entidades financieras se han sumado a esta tendencia, que no solo afecta a las zonas rurales. Este lunes, los clientes de la oficina de Unicaja Banco ubicada en el Edificio Minero de Ponferrada han comenzado a recibir las cartas en las que se les comunica que a partir del 21 de junio –el lunes de la próxima semana– pasarán a ser atendidos en la sucursal de la plaza Julio Lazúrtegui de la capital berciana «donde podrá realizar todas las operaciones financieras como habitualmente lo viene haciendo y recibir el mejor servicio».
La carta en ningún momento hace alusión directa al cierre de la oficina del Edificio Minero. levantado en el contexto de la operación sobre los terrenos de la MSP en la que tuvo una participación decisiva la antigua Caja España, objeto posteriormente de sucesivas fusiones. Para justificar ese cierre, Unicaja Banco alega «la exigencia de adaptarse al nuevo entorno» en su condición de «entidad de referencia en el sector».
«Siempre con la excelencia en la atención al cliente como principal objetivo, hemos iniciado un proceso de optimización de nuestra red con el fin de dotar a nuestras oficinas de los recursos necesarios para prestación personalizada y el trato profesional que usted merece», explica la entidad bancaria en su misiva a los clientes de la sucursal que dejará de prestar servicios el día 21, aunque mantendrá los servicios del cajero automático.
Al menos, el cierre no conllevará la pérdida de ningún empleo. Los trabajadores de la oficina del Edificio Minero serán recolocados en otras sucursales de la entidad. La oferta de Unicaja Banco en Ponferrada, donde anteriormente –desde los tiempos de Caja España– ya había echado el candado en sucesivas fusiones a otras sucursales como las del barrio del Temple, Marpa, polígono de las Huertas o la avenida de España, queda ahora reducida a la oficina principal de la plaza Julio Lazúrtegui, la del paseo de San Antonio en la parte alta y las de los populosas barriadas de Flores del Sil y Cuatrovientos.