Bierzo Aire Limpio denuncia el abandono de la inspección ambiental por parte de la Junta
El colectivo culpa a Suárez-Quiñones de «graves irregularidades ecológicas» y de la falta de personal suficiente.
La ong ecologista Bierzo Aire Limpio ha denunciado la “grave conducta del Consejero de Fomento y Medio Ambiente de Castilla y León por su absoluto abandono de la inspección ambiental, lo que podría estar amparando presuntos delitos de contaminación y poniendo en riesgo la salud ciudadana, en El Bierzo y en todo el territorio de Castilla y León”.
“Con este abandono —que bien parece intencionado y planificado al servicio de las empresas contaminantes— el consejero Suárez Quiñones juega con nuestra salud con una frivolidad cercana a la prevaricación”, afirma Bierzo Aire Limpio en su comunicado, en el que exige al presidente de Castilla y León la inmediata depuración de responsabilidades.
La denuncia surge a raíz del escrito presentado el pasado 11 de junio ante la Consejería de Presidencia de la Junta por los 35 técnicos y jefes de sección del Servicio de Protección Ambiental de Castilla y León. Dichos técnicos especializados advierten a la Junta y a la opinión pública que “con los medios actuales no hay garantías suficientes para realizar de forma correcta la protección medioambiental en la Comunidad y que no pueden controlar a las industrias más contaminantes por escasez de medios”.
“Expedientes paralizados, inspecciones nulas, plazos incumplidos, abandono del servicio medioambiental durante los últimos 30 años, como denuncian los propios funcionarios de la Junta, desbordados y hartos, a quienes expresamos nuestra solidaridad”, afirma Bierzo Aire Limpio.
“Conocemos el modus operandi de Suárez Quiñones para proteger a las empresas tóxicas: por un lado, las autoriza, mientras nos oculta los expedientes; y por otro lado, elimina o reduce a la mínima expresión los servicios de vigilancia e inspección, para que actúen impunemente. El resultado está a la vista en vertederos, canteras, ríos, chimeneas y demás desastres ecológicos que desertizan nuestra comarca y producen serias amenazas a la salud. Exigimos de una vez por todas el cese del consejero tóxico Suárez-Quiñones y la inmediata provisión de medios y funcionarios (mínimo 60 nuevos) en el Servicio de Protección Ambiental de Castilla y León, de modo que se garantice el cumplimiento de las leyes ambientales”., concluye BAL.