Piden al Gobierno la anulación del parque eólico «especulativo» de Barjas
La multinacional noruega Statkraft pretende explotar el proyecto «con sociedades en presunto fraude de ley», denuncia Bierzo Aire Limpio.
En un amplio escrito de alegaciones presentado este miércoles ante la Subdelegación del Gobierno en León, la ong ecologista Bierzo Aire Limpio solicita “el rechazo del proyecto de parque eólico Barjas reflejado en una Declaración de Impacto Ambiental Negativa/Desfavorable, en la denegación de la autorización administrativa, y en la anulación definitiva del proyecto”.
En su escrito —compartido con la Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cantábrica (PDCC) y elaborado con el asesoramiento del Fondo para la Defensa Jurídica de la Cordillera Cantábrica—, Bierzo Aire Limpio alega una veintena de motivos en defensa de la biodiversidad y para mitigar el cambio climático desde un sistema de energía limpia y alternativa basado en el autoconsumo, «frente al modelo hipercentralizado y oligopolístico que las multinacionales eólicas están tratando de imponer en El Bierzo y en toda España».
Bierzo Aire Limpio valora positivamente la energía eólica como fuente que puede ayudar a mitigar el cambio climático, debido a la no emisión de gases de efecto invernadero; pero considera que un incorrecto emplazamiento de los parques eólicos —como los que se pretenden en Barjas, Trabadelo, Molinaseca, Cabrera, etc.—, «supone un grave atentado a la naturaleza y es contrario a las normas que España debe cumplir España como miembro de la Unión Europea», por lo que exige al Gobierno su paralización.
El proyecto «faraónico y especulativo» del parque eólico Barjas supone levantar 22 aerogeneradores de 5,5 MW de potencia nominal unitaria y 200 m de altura a punta de pala en una zona en excelente estado de naturalidad y de conservación. Requiere la construcción de más de 20 kilómetros de pistas de nuevo trazado y la conversión de otros tantos kilómetros de actuales pistas en viales de más de 6 metros de anchura con una gruesa capa de rodadura para soportar transportes de 500 Tm. Además, se deben realizar casi 40 kilómetros de zanjas para soterrar las conducciones eléctricas entre los aerogeneradores y la subestación eléctrica, todo ello con maquinaria pesada. Y todo esto se hace sin tan siquiera conocer el recurso eólico que se pretende explotar que podría agravarse “si así lo aconsejasen los estudios de detalle”, según afirma en su proyecto la propia Statkraft.
El proyecto plantea evacuar la electricidad producida mediante una línea de alta tensión con 174 apoyos y más de 53 kilómetros hasta la subestación eléctrica de Trives (Ourense). «Estamos hablando de pistas, bases, aerogeneradores, torretas y líneas de alta tensión, con eliminación de la cubierta vegetal, alteración del ecosistema y grave huella ecológica, todo lo cual debe ser valorado en una correcta Evaluación de Impacto Ambiental, que deberá ser —sin duda— negativa o desfavorable», señala BAL.
“Que todo esto, pretenda hacerlo en el corazón del Bierzo la multinacional noruega Statkraft, también promotora de los parques eólicos Rebordechao y Prada, da idea de la dimensión del negocio, saqueando el aire y los montes y bosques, bienes públicos por definición. Para ello, Statkraft Spain ha constituido una serie de sociedades vehiculares encubiertas, en presunto fraude de ley”, afirman Aire Limpio y la Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cantábrica.
Con ocultación y prisas
Los ecologistas echan en falta una adecuada planificación energética y una regulación efectiva de este sector en Castilla y León, donde se asienta la totalidad de los aerogeneradores, por lo que entienden que no debería admitirse a trámite ningún proyecto como el de Barjas sin aprobar previamente los preceptivos planes, tanto eólico como de ordenación del territorio.
También aseguran haber constatado «la improvisación y las prisas, incluida documentación defectuosa» y la falta de transparencia con la que todo esto se está tramitando. «Para conseguir sus fines especulativos, Statkraft Spain tendrá que ocupar y afectar bienes comunales, vinculados a las Juntas Vecinales, lo que requiere la aprobación de la Junta Vecinal reunida en concejo tras un proceso de información pública precisa y transparente, que se está hurtando a la ciudadanía berciana», explican.
En cuanto al Estudio de Impacto Ambiental presentado por Statkraft Spain, «entendemos que no cumple con los requisitos de la Ley 21/2013», alegan Bierzo Aire Limpio y la Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cantábrica,. ya que carece de programa de vigilancia ambiental y no cuantifica los impactos de forma global y sinérgica. «Para cualquier proyecto como el de Barjas, resulta necesario estudiar la acumulación de impactos o los efectos sinérgicos producidos como consecuencia de la instalación de complejos eólicos en una envolvente de 25 km. Es decir, niveles de ruido ambiental, impacto en avifauna y quiropterofauna, en el paisaje, etc. La cercanía a Barjas de los proyectos de Trabadelo y Busmayor hace que se tripliquen líneas e infraestructuras —3 tendidos de alta tensión con sus torretas— en un área cercana, provocando un efecto barrera en la avifauna y el ecosistema», detallan.
El Estudio de Impacto Acústico, afirman asimismo, «es claramente deficiente; sin datos de campo de esa fase preoperacional, hecho a distancia; igual que el Estudio Geológico —focalizado en pequeñas áreas—,ignora la zona afectada por todas las instalaciones del proyecto y el notable riesgo que supone desde la perspectiva de la geología, geotecnia y geomorfología el actuar sobre materiales con probabilidad de desestabilización».
Las alegaciones de Bierzo Aire Limpio señalan también el grave impacto sobre el paisaje —»que ignora el Convenio Europeo del Paisaje y toda la legislación europea al respecto», especifican—; la previsible contaminación electromagnética; la afección de toda la red hidrológica de la zona: fuentes, manantiales, arroyos, ríos, incluidas las captaciones para abastecimiento humano; y el impacto socioeconómico negativo, con «mayor despoblación y vaciamiento del ya de por sí Bierzo Vaciado, alejamiento del turismo y otras actividades; empobrecimiento general de las zonas saqueadas en el corto y largo plazo».
El Hayedo de Busmayor
A mayor abundamiento, el proyecto del parque eólico Barjas se sitúa en el límite este del espacio ES1120001 LIC Os Ancares-O Courel, estando alguno de sus aerogeneradores a menos de 200 m de dicho límite. El modelo de protección de la Red Natura 2000 se basa en la constitución de una red ecológica, lo que implica el reconocimiento de los elementos necesarios para su vertebración, más allá de los espacios LIC y ZEPA.
Así, el Parque de Barjas «desafía y vulnera la coherencia ecológica y la conectividad de la Red Natura 2000 que requiere corredores ecológicos y conservar áreas territoriales esenciales o de primordial importancia para la migración, la distribución geográfica y el intercambio genético entre poblaciones de especies de fauna y flora, tal y como regulan la Directiva Europea 92/43 y la Ley 42/2007. Todo ello se ignora en este proyecto, que también vulnera la Estrategia de la UE sobre la Biodiversidad para 2030, publicada el 2 de mayo de 2020».
Lo ecologistas prevén un alto impacto en hábitats prioritarios naturales amenazados de desaparición y cuya conservación supone una especial responsabilidad, dada la importancia de la proporción de su área de distribución natural en el territorio europeo (bosques aluviales de Alnus glutinosa y Fraxinus excelsior, brezales húmedos atlánticos, zonas subestépicas de gramíneas y anuales del Thero-Brachypodietea, manantiales petrificantes con formación de tuf; y bosques de laderas, desprendimientos o barrancos del Tilio-Acerion.
En cuanto a la fauna, advierten de que el parque eólico Barjas afecta al menos a 77 taxones de vertebrados recogidos en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, tres de ellas consideradas como vulnerables y una en peligro de extinción en el Catálogo Español de Especies Amenazadas, incluyendo anfibios, aves, mamíferos y reptiles: desde el oso pardo al alimoche, pasando por el águila real. «Y todo ello, en una zona de especial valor ambiental, incluido el hayedo de Busmayor, el más significativo del Bierzo, en la que el parque eólico Barjas representa una alteración absoluta», concluyen.