Podemos reclama la mediación personal de Mañueco en el conflicto de LM
Pablo Fernández exhortará al presidente de la Junta a que «se implique como en Fasa» para evitar la destrucción de empleo.
El coordinador general de Podemos en Castilla y León, Pablo Fernández, ha querido manifestar su apoyo a los trabajadores y trabajadoras de LM en Ponferrada frente a los 393 despidos que pretende realizar la multinacional, a los que Fernández asegura oponerse “frontalmente”.
Fernández ha destacado que desde su grupo político se va a trabajar “en todos los niveles y en todas las estancias” para intentar impedir los despidos y poder salvaguardar la totalidad de los puestos de trabajo. “La comarca del Bierzo es una comarca muy deprimida que ha sufrido ya el proceso de descarbonización y ahora, que las energías renovables están en auge, no puede permitirse esa destrucción de empleo”.
El líder de la formación morada ha exigido a la Junta de Castilla y León una “explicación directa” a través de la Consejería de Empleo para que interlocute con la empresa con el fin de evitar los despidos. Así mismo, Fernández ha asegurado que mañana trasladará, en la reunión que tiene prevista con el presidente de la Junta de Castilla y León, este tema como “asunto prioritario” y exhortará a Mañueco a que “se impliquen personalmente y medie con la empresa para evitar la destrucción de empleo del mismo modo que se ha hecho por ejemplo con la Fasa en Valladolid”.
En la misma línea, Fernández ha asegurado que se trabajará desde el grupo parlamentario Unidas Podemos y procurarán que los ministerios competentes del Gobierno de España interlocuten y puedan negociar con la empresa para evitar la destrucción de empleo y la deslocalización de puestos de trabajo. “La fabricación de componentes para palas eólicas que se quiere llevar a Francia o a Castellón se puede realizar perfectamente en el Bierzo y nosotros vamos a luchar y a trabajar para que así sea”, explica.
Para finalizar, el coordinador autonómico de Podemos asegura que “no se puede permitir que una multinacional que ha recibido cuantiosas ayudas públicas después actúe a su antojo y pretenda destruir 393 puestos de trabajo de empleados que se han dejado la piel por la empresa y que llevan años ejerciendo de forma impecable su trabajo en dicha factoría”. A juicio de Fernández, el hecho de que la Junta permita actitudes como esta lo que provoca es “vaciar todavía más las zonas más deprimidas de nuestra comunidad autónoma”.