[PÍLDORAS de VERANO] Plenos cansinos para mojigatos de LM
Vamos a despachar esto por la vía rápida, no vaya a ser que nos perdamos algo del apasionante pleno de acción de gracias (perdón, de dación de cuentas) que celebra esta mañana el Ayuntamiento de Ponferrada. De los 18 puntos del orden del día, 13 están destinados a dar cuenta de otros tantos informes. Apenas dos asuntos que merezcan un poco de debate, las consabidas mociones a cual más prescindible y… a cobrar. En verdad, en verdad os digo: Qué cansino es todo con lo calorina que nos cae. Menos mal que en Valdecañada tienen agua para refrescarse. Aunque más que el agua, lo que corre a raudales por allí es la demagogia.
Mañana tenemos manifestación en Ponferrada. Parece que los sindicatos, que hace año y medio pedían ERTE’s a mansalva, ya le han perdido el miedo a las aglomeraciones. O acaso solo se lo tuvieran a las que se producen en los centros de trabajo. Para ir abriendo boca (o solo por abrir la boca para que se vea que está ahí) Ramón pide a LM un «esfuerzo» para flexibilizar el ERE y anuncia una fuerte oposición a la deslocalización. Nos imaginamos que los mandamases de la multinacional General Electric se habrán puesto a temblar. Igual que estará temblando Serafín Vázquez con la petición de dimisión de Ciudadanos.
Lo que corre a raudales por Valdecañada es la demagogia
Ya que vamos por Bembibre, para cansina la polémica que se traen con el dichoso parque de bomberos. Los del PP consiguen que se apruebe una moción en el Consejo Comarcal con el apoyo incluso del PSOE, como si eso fuese a servir para algo, y se ponen estupendos. Sale el presidente de la Diputación a replicarles y después llega la dúplica de los populares en la institución provincial. Calculamos que en total se habrán leído los comunicados unas dos o tres personas: los abnegados encargados de prensa que los redactaron. En fin, lo peor es que La Junta prorroga las restricciones otras dos semanas, hasta el 16 de agosto.
Mientras sigan las maniobras de distracción conseguirán que no hablemos de La deriva autoritaria del Occidente post-COVID, con sus atropellos diarios a derechos y libertades fundamentales. Parece que al penúltimo intento filonazi le va a salir el tiro por la culata: Primer varapalo judicial a la exigencia del certificado covid para ir al bar. Vaya tomando nota el sátrapa Núñez Feijóo. Suponemos que cuando el asunto llegue al Tribunal Supremo, que llegará, quede del todo claro. Y encima «La derecha ha descubierto que ir de rebelde le da votos». Lleva razón Ignatius Farray cuando lamenta el «puritanismo paralizante» de la izquierda, de esa izquierda mojigata que padecemos.