La dirección de LM rechaza la oferta de la Junta para financiar un ERTE
La negativa de la multinacional a considerar la propuesta abona los temores del comité sobre la deslocalización de la factoría.
La quinta reunión negociadora entre la dirección de LM Wind Power y el comité de empresa de la factoría de Santo Tomás de las Ollas, celebrada este miércoles, no solo she cerró sin el menor acercamiento sino que ha contribuido a alejar las posturas y a calentar los ánimos de la plantilla, que estudia ya medidas «más contundentes» además de continuar con el bloqueo a la salida de la producción y secundar mañana jueves de forma que se prevé igualmente masiva la segunda jornada de huelga.
Los sindicaros solicitaron a los representantes de la empresa una valoración sobre la propuesta de la Junta de Castilla y León de convertir el ERE –cuya finalidad es despedir a 393 trabajadores– en un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que financiaría la Consejería de Empleo e Industria. Pero fue como hablarle a una pared, porque los directivos de LM negaron conocer la existencia de esa oferta «y, ante nuestra insistencia de incluirla en la mesa de negociación, esta ha sido rechazada», afirma el presidente del comité de empresa, Gabriel Garnelo.
Este movimiento de la multinacional, apostilla, “confirma la clara intención de la compañía de deslocalizar la fábrica de Ponferrada”, recordando demás que el expediente tiene un carácter trasnacional, al pretenderse recolocar a 240 trabajadores en la planta de Francia. “La Administración Autonómica y el Gobierno de España deben conocer esta posición inmovilista de la Empresa. Han dicho en acta que no contemplan sustituir el proceso de despido colectivo por ningún otro; que no contemplan reconvertir el ERE el ERTE”, resume.
“Si, tal y como afirma la empresa, el ERE está motivado por una bajada puntual de la producción, no parece muy inteligente rechazar una medida que les solucionaría el problema sin coste alguno para la empresa. Con lo cual nos carga de razón cuando decimos que las causas que alega la empresa no son reales y que su intención está cada vez más clara”, concluye Garnelo.