LM se enroca en los despidos en una reunión «estéril e insultante»
La multinacional hace oídos sordos a las propuestas de los sindicatos y elude presentar garantías sobre la viabilidad de la planta.
Los peores augurios se han confirmado. Lejos de mover ficha, como esperaban los sindicatos, la dirección de LM Wind Power se ha enrocado en la reunión negociadora de este lunes y mantiene los 393 despidos, además de la modificación sustancial de las condiciones laborales del resto de la plantilla, integrada en estos momentos por 1.063 trabajadores.
Después del fracaso de esta reunión, la sexta del período de consultas, el comité de empresa no ha ocultado su indignación. “Ha sido vergonzante”, afirma su presidente, Gabriel Garnelo. “No quieren negociar, no aportan documentación justificativa, no valoran ninguna de las propuestas de la parte social y, por supuesto, ningunean la propuesta de la Administración autonómica”, señala.
El comité de empresa presentó una propuesta con más de 20 puntos de negociación, pero la multinacional «se limita a negarlos o a no valorarlos». Además, según los sindicatos, ni siquiera han ofrecido garantía documental alguna de la viabilidad de la planta ubicada en Santo Tomás de las Ollas y tampoco «existe ni quieren un compromiso de futuro».
Cabe recordar que la Junta de Castilla y León se comprometió a asumir todos los gastos de una posible transformación del ERE en un ERTE y que los representantes de los trabajadores pidieron la mediación presencial de la consejera de Empleo e Industria. Sin embargo, se quejan de que «no hemos tenido ningún contacto con los representantes autonómicos» desde que solicitaron su mediación. «Tal vez el problema no sea tan grave como para que tengan que interrumpir sus vacaciones, o tal vez, la localización en el mapa de la empresa, en el Bierzo, tan lejos de la capital autonómica, no merezca ningún esfuerzo para nuestros políticos», ironiza Garnelo
Respecto a las declaraciones de la ministra de Industria, Reyes Maroto, los representantes de los trabajadores aseguran desconocer «cuál es la posición del Gobierno de España para la defensa de los puestos de trabajo de LM». Garnelo recalca que «no percibimos el compromiso necesario con la comarca del Bierzo, al menos no el que tendrían si la fábrica estuviera situada en otras provincias o comunidades autónomas».
Tras esta reunión que desde el comité de empresa no dudan en calificar de «estéril e insultante», ambas partes volverán a sentarse a la mesa de negociación mañana martes, pero sin la menor esperanza de acuerdo. La plantilla continuará en huelga hasta el próximo viernes y previsiblemente estudiará nuevas acciones de presión ante la postura inamovible de la multinacional perteneciente al grupo General Electric.