[REFLEXIONES DE UN OUTSIDER] ¡Mátalos a todos, Pedro!
LUIS CEREZALES | Arturo Pérez Reverte considera a Pedro Sánchez como un personaje fascinante al que no quisiera tener como marido de su hija. Le ha dedicado recientemente calificativos de esta guisa: maquiavélico, malo, chulo, arrogante, ambicioso cínico, y para un novelista un personaje interesantísimo.
Antaño lo había definido como valiente pero también como: un killer sin escrúpulos e inmune a las hemerotecas que iba a aguantar bien; un pistolero que los va a matar a todos. Pronostico del que ahora afirma: así ha sido, ha matado a todos, incluso a los sicarios que mataban en su nombre y al rey no porque lo necesita, sino, también lo mataría a él.
El pasado domingo, Sánchez vino a Ponferrada a no decir nada que no fuera esa ocurrencia de la Ciuden Rural, que es certificar su muerte energética y asumir un fracaso sin paliativos de la que originalmente fue una idea potente y cargada de argumentos todavía inéditos.
Primero la llevaron al desastre con el delirio del carbón limpio y después les dio por convertirla en inútil gestoría pública, ahora se sacan de la manga la Ciuden Rural que, puestos a parir, también podían haberla transformado en galáctica, submarina o vulcanóloga, que está de moda.
Ciuden y Rural como que no casan. Puestos así juntos cabe preguntarse con la misma perplejidad e intencionalidad que le atribuyen a don Pio Baroja cuando le interrogaron sobre El Pensamiento Navarro. La coletilla ya la saben. La Ciuden no necesita mutar, necesita ser repensada, volver al origen y dejarse de las milongas de los caciques de turno.
Para hacer una especie de Extensión Agraria del Franquismo al servicio de la España rural y vaciada no necesitan cargarse la Ciuden energética. La montan ad hoc y punto. No es una mala idea, es buena, pero ya se sabe que los sociatas tienen una acusada querencia a convertir las buenas ideas en cementerios de ilusiones y oportunidades.
Esto de la Ciuden mutante no es más que otra de sus muchas y graves equivocaciones de estos últimos tiempos: fundamentalismo renovable a tope, fiasco clamoroso del Futur-e, o presupuestos nacionales roñosos… volveremos sobre ellas en otras columnas para no aburrirles demasiado con los dislates a los que nos tiene acostumbrados esta gente.
En definitiva, en ese mitin, no hubo ninguna aportación de interés en lo que al Bierzo se refiere pero se hicieron afirmaciones pintorescas como esa de que: ahora las decisiones no se toman en el despacho de un empresario ni en la barra de una discoteca. No, ahora hacen lo que le sale de las pelotas al cacique del oligopolio amaestrados por los dictados de las sacerdotisas oficiales del nuevo sectarismo energético.
Pero vayamos al grano. Estas cosas pasan cuando los que mandan por aquí o por acullá no tienen ni puta idea de lo que se traen entre las manos, y con esa ignorancia supina no son capaces ni de indicar al boss algo potable que la gente recibiría con alborozo. Pero ya ven nada de nada, compitieron entre ellos a quien daba el electroencefalograma más plano.
Anda que no había otras cosas para que Sánchez sacara pecho ante los bercianos, pero les traía al fresco porque lo suyo no era aprovechar la ocasión en beneficio de sus representados y paisanos sino ser mansos, no levantar ampollas y aplaudir a rabiar cualquier gilipollez.
El casting de los mandarines orgánicos socialistas desde la Comunidad al Municipio no tiene desperdicio por inane y trivial, escuchándoles en su actuación como teloneros bien podía pensarse que los había seleccionado Pocoyó para un reality político titulado Malos, Peores y Viceversa.
Lo jodido de esto es que van a tener cancha los próximos años, y estaremos en sus manos en unos tiempos que serán cruciales para el porvenir de nuestra tierra. Tras la hecatombe toca reconstruir con cabeza y eso es muy complicado, cuando no inviable, con una clase política de referencia indolente, incapaz y genuflexa.
Damos por supuesto que los mencionados van a salir elegidos, las siglas se lo garantizan, daría igual que pusieran a la estatua de la Carrasca o a la mula Francis. Las actas y poltronas las tienen aseguradas y queramos o no nos los vamos a comer con patatas, salvo que desde el propio partido socialista se apiaden de nuestra orfandad de hecho y de desgracia.
Y aquí es donde enlazamos con el comienzo de la columna. Nuestro personaje providencial para resolver el problema solo puede ser el Presidente Sánchez y por eso le decimos: ¡Mátalos a todos, Pedro! Si de verdad quieres sernos útil, quítanoslos de en medio, cárgatelos sin compasión, políticamente claro está.
No decimos que lo lo hagas al estilo coreano de Kim Jong-un, mejor a la española que es dando canojías. Si trocaste en rústica a la tecnológica Ciuden en un pispás, poco te costará encontrarles acomodo a satisfacción que es lo que en definitiva les importa. Te asesoro gratis total.
Manda a uno de agregado a la estepa a bailar kalinka con los cosacos, nombra a otro como Comodoro del puerto de mar de La Barosa; para el tercero restablece la Dirección Nacional de Regiones Devastadas; y al último, que tiene más peligro porque pretende castigarnos desde Pucela, reclúyelo de hermano lego en la cartuja de Miraflores.
No es que sean precisamente los cuatro jinetes del Apocalipsis, pero son un estorbo, un tapón, un lujo que en momentos tan críticos no podemos permitirnos. Da repelús imaginar que la suerte del Bierzo por la parte sociata estará en sus manos, por eso Presidente Sánchez te necesitamos.
No nos defraudes Pedro, un killer siempre es un killer, ahí tienes una buena ocasión de hacer nuevas muescas en la culata de tu revólver; y cuando Pérez Reverte novele tus andanzas seguro que el Bierzo será tu Ok. Corral. Lo dicho: ¡MÁTALOS A TODOS, PEDRO!