21 trabajadoras denuncian al Ayuntamiento por carecer de plan de igualdad
Malestar en el área de Bienestar Social por la brecha salarial con otros departamentos que observan en la RPT.
La Relación de Puestos de Trabajo (RPT) que está elaborando el Ayuntamiento de Ponferrada amenaza con provocar más de un quebradero de cabeza al equipo de Gobierno encabezado por Olegario Ramón. Según ha desvelado este jueves el portavoz municipal del PP, Marco Morala, 21 trabajadoras del área de Bienestar Social han interpuesto una denuncia contra el consistorio ante la Inspección de Trabajo por el incumplimiento de su obligación de elaborar un plan de igualdad, diagnóstico de situación, auditoría retributiva y registro salarial.
Morala, que mantuvo esta mañana una reunión con una representación de las trabajadoras del área de Bienestar Social, Infancia e Igualdad, ha manifestado a través de un comunicado su apoyo a las reivindicaciones «tendentes a disminuir la brecha existente con este colectivo de Bienestar Social al que tanto se le debe por su esfuerzo en la pandemia». El portavoz popular advierte de que «a los problemas de este colectivo no es ajeno el grado de feminización del puesto de trabajo» y acusa al concejal de Personal, José Antonio Cartón, de no poner los medios para eliminar en la RPT la brecha salarial existente por cuestión de género a pesar de sus promesas en ese sentido.
Para los populares, el momento de la elaboración de la RPT resulta «particularmente proclive» para que esta situación se corrija, «desde la conciencia de que no se trata únicamente de una cuestión económica». Junto a las reivindicaciones salariales, subraya, «existen otras que demuestran el escaso interés del equipo de Gobierno en solventar las necesidades de esta área». Y pone como ejemplo «la insuficiencia absoluta del espacio físico disponible para realizar su trabajo y de unas oficinas adecuadas».
El PP también considera necesario que el área Bienestar Social vuelva a contar con un ordenanza «que era muy necesario y que se ha ido a otras áreas». Según su análisis de la situación del servicio, «lo que se pone de manifiesto, en última instancia, es que falta estructura en esa concejalía, cuando solo hay un coordinador, y el resto de personal se sitúa al mismo nivel».
«El alcalde y el concejal harían mejor en dialogar y consensuar para evitar medidas que a nadie le gustan en lugar de tratar de manejarse siempre con imposiciones. Hace meses que sabían esta necesidad y podían haberse aplicado a resolverla, si no fuera por la habitual indolencia, que en este caso parece más incapacidad e irresponsabilidad. Luego se les llena la boca de igualdad y las manos de pancartas. Es el momento de demostrarlo en el ayuntamiento en la RPT y con el plan de igualdad previo», señala Morala.