Quejas por el «pésimo estado» del camino vecinal de San Vicente de Arganza
La junta vecinal reclama la conversión en carretera de la pista de seis kilómetros hasta Vega de Espinareda.
La junta vecinal de la localidad de San Vicente ha manifestado este miércoles su malestar por el estado en que se encuentra actualmente el camino vecinal que une esta pedanía, perteneciente al Ayuntamiento de Arganza, con la localidad de Vega de Espinareda.
La junta vecinal asegura que lleva años «pelea constante» por conseguir que este camino, de seis kilómetros, se convierta en carretera. Un proyecto que incluso con fondos consignados, se quedó paralizado hace años con la crisis.La pedánea de San Vicente, Ángela Abad, defiende que seguirán intentando que ese proyecto se retome, pero mientras tanto considera que es responsabilidad del Ayuntamiento de Arganza mantener en buenas condiciones el camino vecinal.
La pedánea recuerda que en el verano de 2021, el alcalde de Arganza, César Antonio Cabezudo, se comprometió en una reunión a que el Ayuntamiento repararía los socavones y desbrozaría el camino en el tramo que le corresponde. Sin embargo, explica que “en enero de 2021 y tras varios avisos, tenemos la callada por respuesta mientras el camino está de pena, está intransitable, prácticamente sólo se puede pasar con un todo terreno”.
“Estamos cansados de esperar, y hartos de que todo el mundo se llene la boca de hablar del medio rural y después incluso hasta los representantes del partido al que también pertenezco nos dejen de lado”, lamenta Abad, que apunta que personal del Ayuntamiento «ha desbrozado un poco el camino, pero es necesario un relleno de baches con grava y un pisón para allanarlo y dejarlo transitable para vehículos y piden que procedan a realizarse estos trabajos».