Xeitu mantiene su oposición a la planta de La Recuelga aunque no se derriben los lavaderos
La solicitud de BIC presentada hace un mes incluía la delimitación de toda la zona por ser un paisaje conformado por la minería del carbón.
Ante la información conocida hace unos días acerca de un acuerdo entre el Ayuntamiento de Páramo del Sil y la empresa promotora de una planta fotovoltaica en La Recuelga, anunciando que con él se evitaría la desaparición de los dos antiguos lavaderos existentes, el Club Xeitu ha emitido un comunicado en el que celebra la noticia, a la espera de que sustancie en un documento oficial.
«Es de lamentar, en todo caso, que su consideración hacia estos bienes del patrimonio cultural haya venido sobrevenida ante el rechazo a un proyecto que contemplaba su total destrucción. Nada cabe esperar de quien definen como “la más alta representación” de la sociedad que promueve el parque solar, pues acreditada tiene su nula empatía hacia todo lo que no tenga que ver con sus negocios en las condenas judiciales que acumula por delitos contra el patrimonio histórico o el medio ambiente. Pero cabría esperar algo de conciencia hacia el patrimonio a quienes ocupan cargos públicos, aunque solo sea viendo los frutos que su puesta en valor está dando en municipios cercanos, como Fabero, en total contraste con la desidia de Páramo del Sil», advierte Xeitu.
El. colectivo recuerda que, al igual que otras entidades, ha solicitado a la Junta de Castilla y León la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) del patrimonio industrial de La Recuelga. «Nuestra petición incluyó la protección de todo el paraje y no solo de los lavaderos, tanto porque existen otros elementos de relevancia (las torres de la línea de baldes o el edificio que albergó laboratorio de muestras), como porque todo el conjunto debe interpretarse como lo que es: un paisaje conformado por la secular actividad minera en sus distintas fases de explotación, tratamiento y transporte del carbón», detalla.
La declaración de un BIC implicaría la delimitación de un entorno añadido a la protección física del monumento atendiendo a posibles afecciones visual, ambiental, etc… A modo de ejemplo, se remiten a uno cercano en el espacio y el tiempo, el BIC de la Cuenca Minera de Fabero, que en cada uno de sus enclaves (Pozo Julia, Pozo Viejo, Mina Negrín, etc.) no solo incluye la protección de los castilletes y edificios, sino que delimita su entorno como lo que es, parte de ellos.
Para Xeitu, por tanto, «no tiene ningún sentido reconocer la relevancia de un elemento del patrimonio cultural, si a su alrededor se va a permitir cualquier actuación que le pueda afectar, como indudablemente haría la instalación de una planta fotovoltaica». Asimismo, reitera la «afección que esa planta tendría en el trayecto del ferrocarril Ponferrada-Villablino, sobre el que acaba de ser solicitada una importante subvención al Ministerio de Transición Justa para su recuperación y uso turístico».
Por todo ello, Xeitu insiste en que rechazará la nueva versión del proyecto de la planta fotovoltaica que se anuncia, aunque excluya la demolición de los lavaderos, «puesto que afectará gravemente a los bienes de patrimonio industrial existentes y al recorrido del ferrocarril, estableciendo a su alrededor una instalación que va a beneficiar a unos intereses particulares, pero que no va a suponer el más mínimo beneficio para el interés público, ni a crear empleo ni riqueza en la zona».