Opositores a una plaza del campus de Ponferrada impugnan las preguntas del examen
Los opositores a la Universidad de León están indignados con la forma en la que se está llevando a cabo el proceso selectivo para cubrir una plaza auxiliar de servicios en el campus de Ponferrada, a la que optan 120 aspirantes.
Hay que remontarse al año 2011 cuando hubo otro proceso selectivo en lo que a este tipo de puesto de trabajo de la ULE se refiere, pero el malestar entre los opositores ya no radica solamente en la tardanza de la convocatoria, sino en el número de plazas al no haber sacado todas las vacantes que tiene pendiente la ULE además de realizar un proceso selectivo con una única vacante y con «numerosos errores».
Dichos errores han llevado a los opositores a presentar numerosas impugnaciones de preguntas que son una sinrazón y que no se corresponden con los tiempos que corren, como la pregunta en lo relativo a materia de correo postal que se anula porque todas las alternativas de respuesta son correctas, ya que el “Acuse de recibo” está reservado exclusivamente para los servicios telegráficos y, por ello, no puede aplicarse a ninguno de los productos indicados en las alternativas.
Pero lo que mayor crispación ha generado entre los opositores es la respuesta a las impugnaciones presentadas en lo que se requiere al apartado de urgencias y emergencias, pues entre los numerosos errores facilitados en el supuesto práctico dan por válido que ante una situación de incendio se debe llamar a la empresa de mantenimiento de extintores en vez de al servicio de bomberos atentando contra toda lógica racional.
La justificación que da el tribunal calificador es que “se trata de un supuesto de comprensión e interpretación de información escrita y gráfica, y de decisión de líneas de acción; No se pedía, por tanto, que se contestasen las preguntas de acuerdo con la normativa o procedimientos actualmente vigentes en la Universidad de León, ni que se valorase la idoneidad o lógica del procedimiento que figura en el esquema, sino únicamente que se aplicase ese concreto procedimiento a la resolución de la situación planteada“.
«Es una tomadura de pelo», asegura un opositor, ya que el temario es claro y la propia Universidad de León ha establecido su protocolo de actuación ante tales circunstancias, un protocolo que es público y que en base al mismo se puso una respuesta, para dar como opción válida una opción que contradice lo establecido en las directrices de la propia ULE y de la lógica humana. «No tiene sentido no llamar a los bomberos cuando hay un incendio para llamar a una empresa de mantenimiento de extintores, es indignante que entre las respuestas alternativas te den la opción de marcar las instrucciones dadas por la ULE para este tipo de situaciones y que luego den por buena una opción de lo más absurda», asegura otro de los aspirantes.
Los aspirantes no descartan movilizarse y emprender acciones judiciales para que se declare nulo el proceso selectivo ya que de las catorce preguntas impugnadas en los dos exámenes solo han sido admitidas un par de ellas, solicitando una mayor implicación de los sindicatos para que la provisión de los puestos de trabajo mediante procesos selectivos «no sean un atropello para los opositores ni para el personal interino y que estos sean justos», explican en un comunicado.