[OBITUARIO] Solís Fernández, prestigioso naturalista con inquietudes políticas
Solís Fernández Fernández ha fallecido a los 89 años en la localidad lucense de Becerreá y será enterrado este lunes en Matarrosa del Sil, localidad donde nació en octubre de 1932.
Su niñez y juventud las pasó en gran parte pastoreando el ganado, de ahí que su contacto con la naturaleza y el medio ambiente circundante hicieran despertar en él un interés que con el paso de los años le llevó a atesorar uno de los mejores museos documentados de Ciencias Naturales de España, que terminó instalándose en Carracedelo.
Veinte años después, cuando el azar puso en sus manos un anuncio de la prensa escrita en el que ofrecían un curso de taxidermista por correspondencia, inició su auténtica vocación como artesano formado a sí mismo, genial y enemigo de las falsas alabanzas.
Toda esta experiencia acumulada a lo largo de los años le sirvió para colaborar con el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), recibir invitaciones como la del 2002 del Congreso Internacional que se celebró en Toronto, facilitar información para diferentes tesis doctorales, divulgar artículos y ensayos en diversas revistas de naturaleza o prestar su ayuda en algunos programas del naturalista y conservacionista Félix Rodríguez de la Fuente.
En 2003, el Instituto de Estudios Bercianos le nombró socio de honor en reconocimiento a su labor como estudioso de la fauna y flora berciana, destacando su colaboración tanto con Rodríguez de la Fuente como con los museos de Ciencias de Londres, Berlín, Chicago, Alcalá de Henares y Nueva York.
Ese mismo año, el Ayuntamiento de Toreno le entregó la Picota de Plata en reconocimiento a su dilatada trayectoria a favor de la flora y fauna de la comarca y para agradecerle su labor en la política activa durante los años en que fue presidente de la junta vecinal de su pueblo y concejal de Toreno en las filas de la Agrupación Matarrosa Independiente (AMI). También formó parte de la primera corporación del Consejo Comarcal del Bierzo.