Olegario Ramón, sorprendido por el «gran número» de personas que le piden trabajo
El alcalde de Ponferrada reflexiona sobre sus dos primeros meses de Gobierno en los que reconoce no haber difrutado del cargo y reitera su voluntad de afrontar los «graves problemas» de la ciudad.
«Estos dos meses los he vivido con la angustia de intentar lograr con urgencia una solución a los graves problemas que vive el municipio (transporte público, limpieza y recogida de residuos, estado lamentable de los espacios públicos, falta de servicios básicos en nuestro medio rural, etc.) y la inoportunidad de una enfermedad relativamente grave, diagnosticada a los tres días de ser elegido, que me ha supuesto un contratiempo importante».
Con el párrafo anterior comienza el artículo de opinión con el que el alcalde de Ponferrada, el socialista Olegario Ramón, ha querido compartir con la ciudadanía sus impresiones de los dos primeros meses de mandato. «Ha sido muy difícil asumir que en un Ayuntamiento relativamente grande y con múltiples frentes abiertos se ha de renunciar, casi por razones de salud mental, al control absoluto», confiesa el regidor.
Ramón asegura tener la impresión, «casi constatación», de que le resultará «extraordinariamente complejo» conseguir que los partidos políticos antepongan el interés general «a los egos personales de sus representantes o a los intereses particulares de sus organizaciones». Por todo ello, asegura no haber “disfrutado del cargo” en estos dos meses, «más allá de la asistencia a diversos actos culturales que me han aportado la serenidad necesaria para parecer sereno».
Al alcalde también le ha sorprendido, «aunque sea algo de lo que siempre se ha hablado, que un gran número de ciudadan@s me ha pedido un puesto de trabajo en el Ayuntamiento». Y se pregunta «cómo se habrá gestionado hasta ahora para que la ciudadanía crea que esa es la vía de acceder al empleo público». Y destaca que «para mí esto es particularmente descorazonador, porque siempre ha sido casi una obsesión personal garantizar la limpieza en los procedimientos de selección en nuestro Ayuntamiento». En cambio, se muestra menos sorprendido por «las amistades sobrevenidas y las lisonjerías que genera el nuevo cargo«.
«Aun con todo eso, y animado también por el convencimiento fundado de un rápido restablecimiento de mi salud», Ramón –que se reincorporará a su despacho el lunes 26– promete trabajar «con ahínco, como lo hace y hará mi equipo, para intentar revertir la situación de nuestra ciudad y nuestros pueblos, consciente de la situación complicada que vivimos pero esperanzado». Y expresa su convencimiento de que «la solución de los problemas más graves a corto plazo, aún siendo indispensable, no nos puede desviar del modelo de ciudad que proponemos, ya que alcanzarlo es el verdadero objetivo, con un trabajo de planificación y gestión a medio y largo plazo».