Recogida de firmas en Camponaraya en apoyo de la iniciativa popular por la sanidad
La Coordinadora Antiprivatización de la Sanidad (CAS) estará en Camponaraya el próximo domingo para informar y recoger firmas de apoyo a su iniciativa legislativa popular (ILP) por la recuperación de una «sanidad universal cien por cien pública y de calidad».
La ILP, que requiere el apoyo de 500.000 firmas, consta de cinco puntos: atención sanitaria para todas las personas; derogación de las leyes privatizadoras y recuperación de los centros privatizados; creación de un sistema público de farmacia y productos sanitarios; recuperación y reforzamiento de la atención primaria; y atención sanitaria de los centros de mayores en manos del sector público.
«Continuamente vemos noticias sobre el deterioro de la Sanidad, la falta de personal es más que evidente en todos los ámbitos, desde la atención primaria donde las plazas vacantes dejan de cubrirse elevando la carga de trabajo del resto de personal, sobre todo en zonas rurales y pequeñas ciudades; en el hospital del Bierzo, donde ya el año pasado se hizo una gran movilización por la falta de oncólogos y hace unos días anunciaron la suspensión de las consultas de Cardiología por la falta de especialista; listas de espera de más de 4 meses para operaciones y superando el año para realizar cualquier prueba, lo cual pretenden solucionar privatizando los servicios, en lugar de invertir el dinero público en mejorar el sistema sanitario», explican en un comunicado.
En relación con los «escandalosos datos» listas de espera recientemente publicados, la CAS critica que «mientras los políticos falsean los datos, los del Ibex engordan su cuenta de resultados». El colectivo reitera que «independientemente del maquillaje aplicado, el Sistema Nacional de Salud camina hacia su conversión en un sistema de beneficencia (responsabilidad de todos los grupos políticos al mantener las leyes que lo permiten), para mayor gloria de los seguros privados, que ya suman 13 millones de pólizas (el 20% de la población, aunque hay comunidades con casi el 40 %). Estamos asistiendo a una pugna entre los grupos sanitarios privados por extenderse por todo el Estado. Así, el grupo líder Quirón Salud (grupo Fresenius) dispone ya del 13% de las camas privadas, habiendo crecido durante la pandemia un 22%».
Sin embargo, apunta CAS, la privada ya está reproduciendo los problemas de la pública y en muchos hospitales privados se están produciendo demoras de 6 meses para acceder a una consulta. «La supuesta solución privada es falsa por motivos obvios: la sanidad privada no tiene capacidad para suplir a la sanidad pública; nunca va a asumir lo no rentable económicamente; en los próximos años se producirá una jubilación masiva de sanitarios (por ejemplo, el 46% de los médicos de la red pública tiene 50 o más años y el 21,1% tiene 60 o más años), que afectará tanto al sistema público como al privado, etc.», subraya.