Tibia respuesta a la cuarta manifestación en seis años por un futuro para el Bierzo
La asistencia, menos de dos mil personas, se queda muy lejos de los 15.000 participantes en la anterior convocatoria.
Mucho ruido de petardos y pocas nueces de asistencia. La cuarta manifestación con las mismas reivindicaciones que se convoca en apenas seis años partió desde la plaza Julio Lazúrtegui pasadas las ocho de la tarde para dirigirse al Ayuntamiento, detrás de una pancarta en la que podía leerse X un Bierzo con futuro. Y a modo de subtítulo con declaración de intenciones: «Hay que poner fin a tantas décadas de promesas, mentiras, excusas y discriminación».
En una tarde de temperatura veraniega, con las terrazas del centro de la ciudad repletas, la participación se ha situado muy por debajo de las expectativas generadas por los organizadores. «Es que no estamos ni los de siempre», se lamentaba antes de la salida de la comitiva un asiduo a las movilizaciones, calculando una asistencia similar a la del reciente 1º de Mayo. Muy lejos, desde luego, de las al menos 15.000 personas (20.000 según los sindicatos) que se sumaron a la anterior manifestación por el futuro de la comarca, celebrada en febrero de 2020.
Eso sí, abundaban los dirigentes y cargos públicos de diferentes formaciones desde el PP a Podemos, pasando por PSOE, PCE, IU, UPL, USE, PRB, Coalición por El Bierzo y el concejal no adscrito del Ayuntamiento de Ponferrada. Esta vez no se prodigaron las pancartas con las que en ocasiones anteriores las formaciones políticas trataban de transmitir sus propios mensajes. No pasó desapercibida la de la UPL, con el lema Por un Bierzo con voz propia, autonomía región leonesa.
La jornada de movilización convocada por los sindicatos UGT, CCOO y USO se basaba en 12 razones que van desde «una transición energética injusta» hasta la «explotación de nuestro medio natural, que compromete el futuro del sector turístico y agroalimentario de calidad». La despoblación, la pérdida de autonomía financiera, la precariedad laboral y emigración, el deterioro de los servicios públicos, la desatención de las personas mayores o la «invisibilidad territorial» son otros argumentos expuestos por las organizaciones convocantes del paro a mediodía y de la manifestación vespertina.
Para revertir esta situación, los sindicatos y los colectivos empresariales, políticos y sociales que apoyan las reivindicaciones de la provincia en su conjunto –a la misma hora se celebraba otra manifestación en León, con unos 15.000 asistentes según la policía local– reclaman a «todas las administraciones públicas con competencias en el territorio» la aprobación de un plan extraordinario de actuaciones de reindustrialización e inversiones que contribuya frenar la despoblación y la precariedad laboral.