El Bergidum abre la temporada con una divertida comedia, danza vertical y música
Escape room, una comedia gore muy divertida que aborda las relaciones de pareja y funciona como el mecanismo de un reloj, hará doble sesión el jueves 1 de septiembre a las 19.30 y 22 horas, interpretada por Antonio Molero, Leo Rivera, Marina San José y Mónica Pérez. El viernes 2 se llevará a cabo la fiesta de apertura de la nueva temporada del Bergidum con un espectáculo de danza vertical en la fachada del teatro y un concierto del grupo local Smokey Blue.
Dos parejas de amigos de toda la vida quedan para ir a un escape room en el barrio de Lavapiés, donde recientemente ha aparecido en un contenedor el cadáver de un hombre descuartizado. Los cuatro piensan que les espera un juego divertido para pasar la tarde, poner a prueba su inteligencia y echarse unas risas. Pero, según entran, la puerta de la habitación se cierra herméticamente, comienza la cuenta atrás y empiezan a pasar cosas extrañas. Salir de este escape room no será nada fácil, y el juego se convertirá en un infierno que pondrá a prueba su amistad hasta límites insospechados. Aunque no lo parezca, es una comedia. Una comedia de miedo basada en el juego de moda, que se ha convertido en un fenómeno en todo el mundo.
La crítica ha dicho que Escape room es una de las mejores comedias de los últimos años, que arrasó primero en Barcelona y aterrizó después con el mismo éxito en Madrid, convirtiéndose en una película estrenada el año pasado. Joel Joan y Héctor Claramunt han escrito una obra muy inteligente que combina todos los tópicos de las relaciones de pareja, del suspense y del humor gore. Una comedia divertidísima, llena de ritmo. “Es una de esas comedias infalibles, con las que no hay riesgo de equivocarse, y con la que pasas un muy buen rato”, señaló un crítico.
El viernes, 2 de septiembre, a partir de las 20 horas, se ha planteado un programa doble de danza vertical y música para abrir la temporada 2022/23 en la calle. La compañía Delrevés ofrece en Finale una pieza de danza clásica que utiliza la arquitectura como soporte del movimiento. Con elementos de los ballets El lago de los cisnes, El cascanueces o Giselle, se traslada el baile a la facha del propio teatro. En definitiva, “una mirada a la danza clásica desde otra perspectiva”.
Tras esta pieza, la fiesta continúa con Smokey Blue, formación local con su inigualable oferta de música negra en la que se salta del soul, al blues o al funky, con ecos de Ray Charles, Etta James, Blues Brothers, Otis Reding o Wilson Picket.