Camponaraya rendirá un homenaje anual a los 35 represaliados de la ‘Curva de Magaz’
El acto institucional de memoria democrática se celebrará el primer domingo de septiembre por iniciativa de Podemos..
Los portavoces de los cuatro grupos políticos, que componen el Ayuntamiento de Camponaraya han acordado que el primer domingo de septiembre se celebre anualmente un acto institucional de memoria democrática en honor a los 35 represaliados de la Curva de Magaz., respaldando así una iniciativa de Podemos.
«Quiero agradecer, una vez más, la colaboración de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) y el apoyo recibido siempre por parte de los familiares de las víctimas. Así mismo, debo destacar la unanimidad para llegar a un acuerdo de todas las formaciones políticas del municipio», subrayó Oli Vega, portavoz de Podemos-Camponaraya.
El mes de septiembre tiene una connotación especial para los allegados de la mayoría de los represaliados y para el pueblo de Magaz de Abajo, explica Vega, «puesto que fue el 23 de septiembre de 1936 cuando la barbarie franquista, el odio y la irracionalidad se aliaron para ejecutar vilmente a 11 personas inocentes en ese lugar, e iniciar una escalada asesina, que se prolongó hasta 1945 y acabó con la vida de 33 hombres y 2 mujeres».
“85 años después de que esa barbarie fascista golpeara con furia el corazón del Bierzo, derramando sangre inocente sobre nuestra tierra, creemos que la memoria y el recuerdo de todas aquellas personas», el edil de Podemos considera que este homenaje «es la mejor manera de hacer justicia y de paliar el dolor y el sufrimiento vividos en silencio durante tantos años por sus seres queridos».
«No puede haber desagravio ni reconciliación a través del olvido, y ese ha sido el principal motivo para la activación de esta Declaración Institucional, que desde Podemos hemos promovido. Acudiremos a la Curva de Magaz para recordar a aquellas 35 personas, que fueron asesinadas injustamente y con total impunidad, y honraremos sus nombres cada año para que esa historia jamás vuelva a repetirse», concluye Oli Vega.