El PP emplaza al alcalde a «decir la verdad» sobre las restricciones a la movilidad en el centro
Morala cree que «falta mucha explicación con la Zona de Bajas Emisiones para que los ciudadanos entiendan la decisión municipal».
El portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Ponferrada, Marco Morala, consuela que a tenor de las quejas de los ciudadanos en Ponferrada ante la entrada en vigor de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) para el año próximo «ha faltado mucha pedagogía por parte del equipo de gobierno para explicar el alcance de la medida y la zona afectada».
Los populares recuerdan que hace más de un año ya denunciaron la «improvisación» del alcalde al tener que fijar esta zona, «que en realidad encubría su enorme desidia, ya que en enero de 2020 empezamos a interesarnos por las previsiones que manejaba el equipo de gobierno respecto a las calles afectadas y la temporalización de la entrada en vigor». Sin embargo, apostilla, «se ve que desde enero de 2020 hasta noviembre de 2022 el equipo de gobierno no ha tenido tiempo para hacer previsiones al respecto, y una vez más, a improvisar y cambiar lo que ya habían anunciado».
«Más allá del barullo en que hacen vivir a los ponferradinos por culpa de acumular las obras para que tengan un mayor impacto electoral, no es de extrañar que muchos ciudadanos tengan la sensación de que lo que subyace en el fondo con este retraso es dejar pasar el tiempo de la campaña electoral, para evitar que el cabreo por las restricciones de circulación que implica la Zona de Bajas Emisiones le pase factura al alcalde en los votos», señala Morala en un comunicado.
La sospecha del PP es que «no han encontrado ni de lejos el punto medio entre la preservación del medio ambiente y las necesidades de movilidad en una ciudad como Ponferrada, con un centro tan visitado por vecinos de otros lugares del municipio y por muchos bercianos». Y destaca que «el equipo de gobierno ya reconoció el año pasado que ninguno de los medidores de contaminación da problemas importantes en la ciudad, y los ciudadanos quieren saber en qué les va a afectar a efectos de su movilidad, tránsito y aparcamiento en Ponferrada, teniendo en cuenta que las ciudades en las que ya existe, como Madrid, obliga a un desembolso para aparcar a los que no son residentes en esa zona».
«Pedimos hace dos años que un asunto tan importante para la movilidad y también para los negocios se acordase entonces con los grupos municipales, con los agentes sociales y con las asociaciones. En lugar de eso una vez más desidia e improvisación, y ahora a confundir a la gente con las fechas y querer evitar el impacto electoral, pero sobre todo, opacidad y oscurantismo para no contar por qué esta extensión en calles y que los ciudadanos sepan en que les afecta en concreto», concluye Morala.