[TRIBUNA 6-D] Una Constitución para la concordia y la altura de miras
CARMEN DOEL | Mucho se ha hablado y se habla de la Constitución Española y no han sido ni son pocas las controversias que su articulado genera: sobre la organización territorial del Estado, la Corona, la reforma constitucional o muchos otros aspectos vidriosos de la misma.
En esta ocasión el Grupo Municipal Socialista se quiere centrar en el espíritu que primaba en aquellos tiempos bastante convulsos para poner de acuerdo posiciones antagónicas en tiempos en los que las injusticias de cuarenta años de dictadura aún estaban frescas.
Aquellos padres de la Carta Magna buscaban consolidar la democracia, restablecer la concordia y la convivencia entre españolas y españoles. Y eso generó la obligación apriorística de tener que ceder en puntos ideológicamente importantes para la trayectoria de todos los agentes implicados, de tener que priorizar el entendimiento sobre la controversia, los puntos de acuerdo sobre los de discordia y que se debía actuar con una enorme generosidad y, a la vez, una gigantesca responsabilidad.
El 1 de agosto de 1977 la Comisión Constitucional creó la ponencia que habría de redactar el anteproyecto de Constitución . Los ponentes fueron los Sres. Jordi Solé Tura (Grupo Parlamentario Comunista), Miquel Roca Junyent (Grupo Parlamentario de la Minoría Catalana), José Pedro Pérez-Llorca y Rodrigo (Grupo Parlamentario de Unión de Centro Democrático), Gregorio Peces Barba Martínez (Grupo Parlamentario Socialista), Miguel Herrero Rodriguez de Miñon (Grupo Parlamentario de Unión de Centro Democrático), Manuel Fraga Iribarne (Grupo Parlamentario de Alianza Popular) y Gabriel Cisneros Laborda (Grupo Parlamentario de Unión de Centro Democrático). La ponencia constitucional celebró un total de 29 sesiones en los meses comprendidos entre agosto y diciembre de ese año. Por el carácter reservado de la ponencia no existe versión oficial publicada del contenido de sus reuniones.
Sin embargo sí se conoce pues, aún no siendo exhaustivas sí se publicaron sus minutas y actas en 1984 en el número dos de la Revista de las Cortes Generales. De su lectura se evidencia la cesión por parte de todos en temas tan espinosos entonces como la organización territorial o la Corona o la aconfesionalidad del Estado. Y esas divergencias se pusieron igualmente de manifiesto en las 24 sesiones posteriores de la Comisión de Asuntos Constitucionales y Libertades Públicas.
Y fueron capaces de lograr un consenso que, con sus fragilidades, ha sido la columna maestra sobre la que se ha apoyado la convivencia en paz durante más de cuatro décadas en un país que no se caracterizaba por largos períodos de paz.
Y lo que hoy pretendemos aquí es apelar a ese espíritu en el seno de nuestra Administración, la local, la más cercana a la ciudadanía, la primera puerta a la que llaman cuando tienen un problema, la infantería de la Administración.
La existencia de diferentes partidos en nuestro Estado es un avance importantísimo en la consolidación de nuestro sistema democrático, pero como casi todo tiene sus imperfecciones: la estructura de los mismos y la defensa corporativa de su estatus junto a la debilidad del ser humano, su aspiración de crecer en las estructuras de los partidos, nos llevan con frecuencia a olvidar que por encima de todo ha de estar el bien común, han de estar los problemas, de nuestros vecinos, de nuestras gentes. Y así en el diario ejercicio de la política municipal en muchas ocasiones se ponen palos en las ruedas de iniciativas loables, objetivamente buenas para la ciudadanía, e , incluso, se pierde el respeto y hasta se llega al insulto.
Dice con frecuencia nuestro Alcalde, que cree que predica en el desierto, cuando habla en estos términos pero predicar en el desierto una y mil veces tiene que terminar por generar algo bueno. El 44 aniversario de nuestra Carta Magna, es una magnífica efeméride para seguir predicando en el desierto sobre consenso, unidad, altura de miras y amor al paisaje y al paisanaje.
La democracia hemos de cuidarla todos. En ese sentido desde el Grupo Municipal Socialista del Ayuntamiento de Ponferrada queremos ratificar el compromiso con la Democracia y el Estado de Derecho como pilares de la paz y la prosperidad, como máxima representación de los valores europeos, en cuya defensa y pervivencia se fundamenta el futuro de la ciudadanía española y europea.
Y ya para finalizar, no puedo hacerlo sin pedir, una vez más, el consenso necesario para la reforma inmediata del artículo 49 de la Constitución Española. En materia de Plena Ciudadanía hay que ser ambiciosas, pero también generosas. Es inadmisible que haya siga bloqueada la reforma del artículo 49 de la Constitución que llevó el Gobierno al Congreso de los Diputados en mayo de 2021.
Esta reforma, como bien dice Jesús Martín Blanco, se orienta a erradicar la palabra «disminuidos» de la Carta Magna, consagrando constitucionalmente la expresión “personas con discapacidad” como corresponde a los compromisos internacionales de derechos humanos asumidos por nuestro país. Resulta inasumible que en la España de 2022 nuestra ley suprema se refiera a compatriotas como disminuidos.
Pero el cambio propuesto, va más allá, con una redacción del artículo 49 completamente renovada, que entienda y asuma la discapacidad desde un enfoque exigente de derechos. Asimismo, en esa nueva redacción un lugar propio las mujeres y las niñas con discapacidad, las grandes olvidadas en los textos legales.
Esta reforma constitucional no es un capricho del Gobierno, sino que responde a una demanda de las propias personas con discapacidad, de nuestras familias y de las organizaciones. Responde al pacto parlamentario, de todas las fuerzas políticas, en la pasada legislatura y responde al respeto a la legalidad vigente que emana de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
Esta es la mejor oportunidad para significarse y demostrar si se está o no con la discapacidad. Aquí no hay grises, no hay peros y no caben las equidistancias. Solo tienen cabida el sentido de estado y el sentido común.
- Carmen Doel Mato es portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Ponferrada.